El parchís estilístico de Guardiola, Ayuso y Alegría, mientras Armengol sigue con sus outfits de andar por casa
Puntadas con hilo
Ganan la partida: la presidenta de la Junta de Extremadura, por su look elegante y adecuado, y la vicepresidenta tercera, gracias a sus zapatos y vestido midi, teñido en el color del año
Puntadas con hilo
No hagan cálculos, ya se lo digo yo, falta el amarillo, ese color que está tan de moda como el rojo, el azul o el verde. El tono que vistió Diane Kruger en Cannes, justo ese, no lo han lucido ninguna de las políticas ... en la reunión de presidentes. Es una pena. Sin embargo, hemos visto a Ayuso de colorado, como la bandera de la comunidad que preside; a Guardiola de azul con toques navy, como capitana de la Junta de Extremadura; a Alegría, de verde esperanza, mientras que Marga Proens, Armengol y Yolanda, pasean de blanco como las novias.
Con Chivite no se junta nadie, a juzgar por la foto. Será que para jugar al parchís viste demasiados colorines. Esta temporada se llevan poco los estampados, la cosa va más de colores sólidos, pero la presidenta de Navarra va a la suya, luego dirá que el modelito es reciclado, que hay que ser sostenible y otras excusas más, pero una servidora le indica a la jefa de la Comunidad Foral que el conjunto en cuestión no tendría que habérselo comprado nunca. Si hubiera vestido de amarillo…
La más fashionista de la reunión fue Sara Aagesen, vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que, con su vestido largo, como su título en el Gobierno, de color marrón chocolate y sus tacones midi de inspiración lady, parecía una modelo de la campaña 'Verano en la oficina' de Massimo Dutti. La capitana Guardiola también viste genial y muy acorde a lo que se lleva gracias al top marino a juego con la falda midi de botones dorados y sus taconazos. Ambas con pelo recogido, preparadas para entrar en faena, son las ganadoras del Parchís estilístico.
Yolanda Díaz muy working, acompañada de Montero de la que ya no se separa ni en Roma ni en Madrid, luce un modelo 'utility' por los bolsillos, pero echo de menos que el vestido sea más desestructurado y grandote, según dictan las tendencias. Armengol, en cambio, vuela con su diseño globo que parece un trapito fashion de estar por casa o para ir a comprar frutas y verduras a Sineu. Las bailarinas, santo y seña de la presidenta del Congreso, están muy de moda, pero mejor para el asfalto, porque seguro que tiene los pies llenos de gravilla y arenilla. Proens, también de blanco, se presenta muy embutida. Le recomiendo para esa falda, una blusa más holgada y con mangas.
El otro día escuché a la editora de moda de Yo Dona quejarse y con razón de las diferencias de vestimenta estival para trabajar entre chicos y chicas. Mientras ellos tienen que ir con zapato cerrado, traje o con pantalón chino largo y camisa, ellas se permiten el lujo de calzar sandalias y lucir hombros. Así que Ayuso, por muy estupenda que luzca con el vestido rojo y las cuñas divinas de esparto, debería de haber escogido un modelo con manguita o, por lo menos, unos salones de punta cerrada y tacón midi estilo Sara Aegesen.
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