Lady Gaga revoluciona Venecia: de un tocado con cuernos a su anillo de compromiso

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María I. Ortiz

La cantante, que llegaba acompañada de su prometido Michael Polansky, puso el toque de fantasía con su look que rápido lleva a pensar que es un homenaje a Harley Quinn, el personaje al que da vida en la película 'Joker: Folie à Deux'. Se trata de un espectacular diseño con volúmenes esculturales que la artista complementó con un llamativo tocado, un estilismo que hace retroceder en el tiempo para recordar los primeros estilismos de Lady Gaga.

El vestido, realizado en terciopelo negro y con escote en 'V', es un diseño de Alta costura de Dior. Mientras que su llamativo tocado es una pieza de archivo que pertenece a la colección del irlandés Philip Treacy.

Un conjunto de Tiffany & Co. compuesto por pendientes y un collar en platino y diamantes fueron las joyas escogidas por la intérprete.

Pero este no ha sido el único vestido con el que Gaga ha desfilado por Venecia. De impoluto negro, la artista se cambiaba de modelito tras la proyección de la película para reaparecer con un diseño palabra de honor y realizado en satén que también complementó con un tocado, éste mucho más discreto con redecilla y terciopelo. Una versión mucho más minimalista que la anterior pero con esa cierta carga gótica que Lady Gaga ha querido dejar presente en todos los looks de esta promoción.

Y negro fue también su estilismo de mañana. El modelo elegido por la cantante para su llegada al Festival fue un vestido de alta costura negro de Dior de largo midi, confeccionado en tejido de terciopelo con de escote cuadrado, manga abullonada, cuerpo ajustado y falda de vuelo. Sus tacones de plataforma XL de Louboutin fueron los grandes protagonistas del look.

Un protagonismo que no eclipsó a la inseparable joya que Lady Gaga ha llevado en su dedo en todas sus apariciones. Se trata de su anillo de compromiso, una joya para sellar su amor junto a su pareja Michael Polansky, junto al que ha asistido al Festival y que sin duda no pasa desapercibida. Se trata de un diamante con corte ovalada que parece tener 10 quilates, aunque no descarta que llegue a los 20, según han explicado varios expertos a 'Page Six'. Estas características le darían un valor aproximado de entre 500.000 y 2 millones de euros. Según los propios expertos, encontrar una piedra de calidad para realizar un trabajo como este requeriría además de un amplio tiempo de búsqueda y un buen presupuesto.

La historia de amor de Lady Gaga y Michael Polansky comenzó hace más de cuatro años.