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Los looks de los VMA vs los Emmy
Dos noches, dos galas, dos alfombras rojas, misma decepción. Las princesas del pop compiten con las divas de la televisión en mal gusto. ¿Única conclusión? Los estilistas estaban de vacaciones
Los looks de los VMA vs los Emmy
La actriz de «The Big Bang Theory» Mayim Bialik cuenta en su blog que llevó a sus dos hijos de 6 y 9 años a la última prueba de su vestido a medida para la gala de los Emmy. Escribe que el comentario de ... su primer vástago al verla enfundada en el diseño de Oliver Tolentino fue «It’s way too poofy. No. No.» (Tiene demasiado volumen. No. No.). Hay veces que es mejor hacerle caso a tu hijo de nueve años que al diseñador de turno. Los niños nunca mienten.
El vestido de Bialik no fue el único desastre sobre la «red carpet» de los Emmy. Como regla general, todas las actrices optaron por trajes que no estarían fuera de lugar en el calendario de las Princesas Disney. Faldas con volúmenes exagerados, sobredosis de encaje y de bordados dorados, drapeados poco favorecedores, escotes corazón anticuados y tejidos con brillo que daban aspecto de mala calidad. Va por vosotras Laura Preppon con su vestido futurista desacertado de Gustavo Cadile, Christina Hendricks con ese esperpento rojo de Marchesa, Madeline Brewer de sirena trastornada, Rose Leslie con un vestido desencajado, Katherine Heigl con un traje que le añadía años, Sarah Paulson con lo que parecía una explosión de confeti, Keltie Knight con un diseño indescriptible y Lena Dunham , en su línea, que se salva solo porque es ella.
Glúteos fuera en los VMA
Lo único bueno de estos vestidos de «prom» americano (baile de fin de curso) es que al menos las actrices iban tapadas. No podemos decir lo mismo de las celebrities que pasaron por la alfombra roja de los premios VMA de MTV. No sé si el « dress code » de la gala de los vídeos de música era ir desnudas, pero eso, al menos, lo explicaría todo. Hasta la normalmente recatada Taylor Swift eligió un «body» de manga larga (supuestamente era un mono de pantalón corto) con cachetes fuera, con el que parecía que iba a una competición de gimnasia rítmica. También sorprendió el look de la supuesta niña buena Ariana Grande de Moschino, inspirado en «Pretty Woman». Pero lo más penoso fue el estilismo de Amber Rose que se puso un collar de cadenas en vez de un vestido (¿para qué vestirse, si puedes ir con un complemento?). Y si ya iban ligeras de ropa para el «photocall», las que actuaron durante la gala iban casi desnudas. El leitmotiv eran los glúteos, con Beyoncé y Nicki Minaj luciendo pandero a lo Kim Kardashian (que lució escote en vez de trasero).
En EEUU no tienen justa medida y en la galas menos. O se pasan de recatadas o de exhibicionistas. Menos mal que la semana que viene empieza la semana de la moda de Nueva York y por fin veremos moda en condiciones.
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