Valeria Mazza: «¿Animal más bello del mundo? Soy feliz con lo que Dios me dio»

-No he pactado con nadie. Lo único que pido es salud para poder disfrutar de mi familia y ver crecer a mis hijos.

-Escucho a la más pequeña. ¿Llora Taína?

-Estamos almorzando. Los tres niños, Balthazar, Tiziano y Benicio, han partido al mar con su padre para disfrutar de la playa. Hacen «surf» las mañanas.

-¿Qué le han dado sus hijos?

-Sabiduría y tranquilidad. Me han hecho conocer lo que es el amor. Cuando tienes hijos ese amor es completamente diferente, es nuevo, es único.

-Créeme un fondo de armario

-Es para quien tenga un vestidor de 220 metros cuadrados o un armario de un metro cuadrado. El libro está dirigido a todas las mujeres a quienes les gusta disfrutar de su femineidad sin culpa y con personalidad. Nunca pasará de moda.

-¿Se siente culpable por ser bella?

-Vengo de Argentina, del misterio Sur, de una clase media y de un pueblito muy pequeño, Paraná, donde crecí y mis mayores aspiraciones eran ser maestra. Con «Crea tu fondo de armario» intento que en el momento en el que estamos paradas delante del espejo, pensando qué nos vamos a poner el día de hoy, no sea vivido con angustia. Es puro juego.

-¿Juego en el cuerpo?

-Hasta los 18 años nada me importaba menos que si me ponía un vestido, un pantalón o una falda. A partir de ahí descubrí mi femineidad, mi sensualidad.

-Seduzca a los lectores de ABC.

-La seducción es una herramienta maravillosa de la mujer que hay que usar.

-¿Un consejo para tener estilo sin morir en el intento?

-No tratar nunca de parecerse a otra persona, ni serlo; hay que ser uno mismo, y tratar de conocerse, aceptarse.

-¿Y usar las armas de mujer?

-Todas tenemos nuestras propias armas para salir y seducir al mundo.

-¿Cuál es su fetiche?

-Los zapatos.

-¿De qué color?

-De todos. Eso genera discusión en mi pareja porque voy ocupando cada vez más espacio. Los hombres no pueden entender que nos detengamos delante de una vidriera al descubrir uno nuevo.

-¿Qué almuerza su pequeña Taína?

-Puré con carne, pero está más entretenida en hablar con usted.

-¿El mejor cosmético es la felicidad?

-Estoy de acuerdo. Uno transmite lo que siente y se ve en nuestra piel, en lo que irradia el cuerpo, en cada gesto.

-¿Es frívolo el mundo de la moda?

-Allí trabajamos seres humanos.

-Pero lo que se vende es un universo de fantasía, glamour y belleza, por supuesto.

-Y puede ser bastante frívolo. Hay seres maravillosos, otros menos, gente que vale la pena conocer, y ¡otra que me hubiera gustado no conocer nunca!

-¿Por qué las modelos son tan delgadas? Rubens no las habría pintado.

-Las modelos siempre han sido flacas, pero me parece que el límite es la salud. Es peligroso cuando el mensaje es de modelos tan flacas. Estamos viviendo al límite, y hay que proteger a esta gente.

-¿Existe la belleza interior?

-Obviamente. Yo la he experimentado.

-Desfile, pues.

-En la portada que hice de una revista para ciegos. Descubrí un mundo maravilloso, diferente. Me propusieron hacer una miniedición del libro para ciegos.

-Y palparían su belleza en braille.

-¿Sabe que hay una comunidad de gente ciega que me conoce? La belleza va más allá de una foto y las cosas que una hace, más allá de lo que se puede ver.

-De Ava Gardner se dijo que era el animal más bello del mundo. Hoy se dice que usted es su heredera natural, por lo tanto, nuestro animal más bello del mundo. ¿De acuerdo?

-¡Ah, qué maravilla! Me parece muy difícil opinar sobre mí, pero digamos que yo soy muy feliz y estoy conforme con lo que Dios me ha dado.