A solas con la reina del Upper East Side

Su álter ego en la vida real, la actriz estadounidense Leighton Meester , de 24 años, ha hecho una fugaz visita a Madrid como imagen de la firma de cabello Herbal Essences. Vestida con un Hervé Leger crudo y unas altísimas sandalias doradas de Pierre Hardy , nada evidenciaba el ajetreo de sus últimas 24 horas: asistir a la gala del MET en Nueva York, volar sin apenas dormir hasta Madrid - con el 'jet lag' correspondiente -, atender a los medios durante 8 horas y estar a punto de coger otro vuelo a Londres. Y todo ello radiante y sin un signo evidente de cansancio (con ayuda de su estilista, Charles Baker Strahan ).

Leighton dista mucho de la déspota Blair, aunque sí que comparte con ella una exquisita educación. En las distancias cortas se le ve más guapa y más alta de lo que parece en televisión. Simpática y muy agradable, nos confesó que en cuestiones de belleza le gusta estar «lo más natural posible» , que siempre se desmaquilla a conciencia, y que con una buena hidratante y un toque de máscara de pestañas está lista.

La actriz nos habló de su debilidad por la moda y que le encanta ir de compras «tal vez demasiado» . Siempre encuentra algo especial en Barneys (Nueva York) y puede pasarse horas de tienda en tienda. Su ruta particular de tiendas «vintage» tiene dos paradas indispensables: «INA y Fisch for the hip, en Chelsea» . «Me encanta experimentar. Suelo mezclar prendas más clásicas, no siempre de grandes diseñadores –aunque adoro a Louis Vuitton, Fendi, Calvin Klein, Proenza Schouler o Emilio de la Morena - con otros básicos que compro en TopShop, Urban Outfitters o Stella McCartney ». Le gusta el estilo de mujeres como Chloé Sevigny, Cate Blanchett o Helen Mirren.

Se dice que su personaje en la ficción está inspirado en Olivia Palermo , una de las «niñas bien» del Upper East Side. Leighton nos confiesa que no la conoce (ni tampoco su estilo de vestir) y que ella misma se lo preguntó a Cecily von Ziegesar, la autora del libro en que está basada la serie. Y no, Blair no es Olivia. «Aunque supongo que hay similitudes», dice sonriendo.

Definitivamente, el «fenómeno Carrie Bradshaw» tiene un digna heredera del «chic» más neoyorkino.