Rafael Tarradas Bultó: «La editora me dijo que no me iba a forrar, pero sí pasarlo bien»

El nieto (y ahijado) del legendario Paco Bultó , fundador de Montesa y Bultaco, sobrino de Álvaro Bultó, el deportista de riesgo que murió trágicamente en 2013, y primo de Sete Gibernau , dos veces subcampeón del mundo en MotoGP, nunca imaginó que acapararía también la atención de todos los medios por novelar la vida de su familia. «Todo empezó porque paso muchos fines de semana solo en una cabañita que tengo en el Valle del Tiétar (Ávila) que no tiene luz y, cuando llega la noche, se puede hacer poca cosa que no sea leer o escribir a la luz de las velas. Como me encanta la historia, me puse a recopilar las anécdotas que me habían contado mis abuelos de sus vivencias durante la Guerra Civil, y me dediqué a darles forma sobre papel para que no se perdieran, y acabé rellenando más de 600 páginas de una mezcla de realidad y ficción, que imprimí en una imprenta de Valencia, solo para regalar a mis padres y unos tíos por Navidad», cuenta Tarradas.

«Parece que les gustó, y empezaron a pedirme ejemplares mis primos y algunos amigos, pero como me costaba 60 euros cada libro me hice el remolón hasta que leí que en Amazon podías imprimir libros a demanda. En julio de 2019 me lancé a hacerlo y vendí 504 ejemplares en 8 días, pero tuve que parar la edición porque me llamaron de Planeta para interesarse por mi novela, y ahí arrancó este sueño».

La editora de Espasa se enamoró de su historia de amor, supervivencia, lealtad y coraje en la España de la primera mitad del siglo XX y, desde el pasado jueves las mejores librerías españolas tienen ya en sus escaparates «El heredero», con una tirada de 20.000 ejemplares y mucho ruido mediático. La madrina del lanzamiento ha sido Eugenia Silva , y las redes de Paula Echevarría , Carolina Herrer a , Luis Medina o Chiqui Calleja se han hecho (mucho) eco. Todos forman parte de La Junta, un grupo de amigos que se reúne una vez al mes en Greener, el restaurante del que Tarradas es socio con José Asin y el actor Fernando Andina . «El alma mater de la pandilla fue la venezolana Eliza Arcaya , propietaria del restaurante El Velázquez donde nos reunimos por primera vez».

La prensa lo tilda ya de «fenómeno literario», algunos informativos han cerrado con esta historia y muchas fans le animan en su Instagram al grito de «vamosss Rafa». Confiesa que está teniendo más éxito con las mujeres desde que empezó todo, pero no tiene novia y le gusta su soltería. «El equipo de Espasa me advirtió que con esto no me iba a forrar ni a convertir en una superestrella, pero que me lo iba a pasar muy bien. Y es lo que me está pasando».

Le preguntamos si, con esa mirada ¡y esa sonrisa, nunca le han tirado los tejos para hacer cine, y responde riendo, que solo se los han tirado para hacer anuncios «porque tengo cara del vecino amable». Pero visto lo sucedido con Espasa, no sorprendería que a la puerta de ese «vecino amable» llame una productora para hacer una serie de su novela porque, como ha escrito Pérez Alcalde , «hay novelas que te atrapan, te transportan a una época de gloria. Y esta es una de ellas».