Michael Douglas se resiste a romper lazos con Mallorca

Hace unos días salía a la luz la noticia de que Douglas había comprado por 15 millones de euros a su exmujer Diandra Lucker -junto a quien había adquirido la propiedad a comienzos de los años 90- el porcentaje de la mansión que le pertenecía, quedando de esta manera como único propietario de la vivienda. La pareja se había separado 11 años después de haber adquirido su «refugio» español. La crisis del coronavirus y la muerte de su padre Kirk Douglas el pasado febrero hicieron replantearse al actor sus prioridades y decidió mantener su residencia en España.

Hace ya varios años que el nombre de L’Estaca figura en la prensa de todo el mundo. Pese al lujo de sus instalaciones, la propiedad no encontraba un comprador, aunque había sido puesta en venta en varias ocasiones desde 2014. La mansión, que tiene 150 años de historia y supo ser el hogar del archiduque de Austria Luis Salvador de Habsburgo , se encontraba a la venta por 29 millones de euros, lejos de aquellos 50 millones de euros que se pedían por ella seis años atrás. La propiedad de 77 hectáreas dispone de unas fabulosas vistas a la sierra de Tramuntana, más de 1.000 metros habitables, viñedos, piscina de mármol, sala multimedia y acceso directo al mar.

No es la primera vez que la mansión mallorquina se convierte en el «nido de amor» veraniego de la pareja de actores. Durante varios años, Zeta-Jones ha compartido en su perfil de Instagram fotografías tomadas en L’Estaca. Toda una influencer, la actriz acumula 3,5 millones de seguidores en la red social. Es allí donde el domingo pasado compartió una imagen en la mansión junto a la leyenda «Perezosos, brumosos, locos días de verano ».

Las autoridades mallorquinas festejan la llegada de los rostros conocidos, debido a la publicidad que implica para la región la visita de los intérpretes de Hollywood, especialmente en un año como éste en el que la caída del turismo a nivel internacional es preocupante.

Pero el lazo entre Douglas y Valldemosa -la localidad donde se ubica la espectacular mansión- se creó años atrás, cuando el marido de Zeta-Jones invirtió 2,3 millones de euros en la construcción del Centro Cultural Costa Nord, destinado a distintas actividades vinculadas al ocio.

Hasta comienzos de este año, el actor y su exmujer habían convenido utilizar la mansión veraniega alternativamente, por períodos de seis meses, pero ahora pertenece durante todo el año a Douglas. Toda una alegría para la estrella de la pantalla grande, que en el mes de febrero se refería a esta mansión veraniega como « uno de sus lugares favoritos en el mundo ».