Hazte premium Hazte premium

Britney Spears rompe su silencio y pide liberarse del yugo de su padre

La cantante ha expresado su «fuerte oposición» a que su padre vuelva a controlar las decisiones de su vida privada y pública.

Britney Spears AP

ABC

A finales del pasado mes de julio, el movimiento Liberemos a Britney (Free Britney en inglés) se convirtió en un fenómeno online decidido a salvar a Britney Spears de la Autoridad Parental que el juez otorgó a Jamie Spears sobre su hija en el 2008.

Y es que durante los últimos 12 años, la cantante se ha visto obligada a obedecer las reglas de esta tutela judicial que impone decisiones sobre sus finanzas, su vida personal e, incluso, lo que puede publicar en sus perfiles de redes sociales. Las seguidoras de Britney han incrementado su fervor especulando que la cantante, de 38 años, podría ser prisionera de su padre y necesita ser rescatada. «Britney nunca ha tenido control de su vida. No me importa si te gusta o no su música, nadie merece algo así», escribió la página dedicada a las celebridades «Diet Prada» en Instagram.

Ahora, Britney ha realizado una petición a la Corte Superior de Los Ángeles (EE.UU.) para que los detalles y procedimientos de la tutela legal controlada por su padre salgan a la luz. Su abogado Samuel D. Ingham III hizo referencia al apoyo público de los seguidores de la artista para demandar que no se gestione bajo secreto el caso, tal y como demanda su padre. «La tutela de Britney ha atraído un nivel de escrutinio sin precedentes por parte de los principales medios de comunicación y las redes sociales», dice el documento entregado en los juzgados el miércoles y publicado por «Los Ángeles Times» este jueves. «Lejos de ser una teoría de la conspiración o una 'broma' como James dijo a los medios, en gran parte este escrutinio es un resultado razonable e incluso predecible del uso agresivo de procedimientos de 'sellado' por parte de James para minimizar la cantidad de información significativa puesta a disposición del público», añadió.

La objeción forma parte de las audiencias que se están celebrando para decidir el futuro legal de la cantante de 38 años, quien en otros documentos ha expresado su «fuerte oposición» a que su padre vuelva a controlar las decisiones de su vida privada y pública.

Hasta el momento todos los procesos abiertos se han desarrollado a puerta cerrada y sin información pública, algo a lo que se opone la cantante. El abogado de Spears reclama una mayor transparencia del caso «para que retenga la confianza de la ciudadanía» con respecto a ese «proceso cautelar». «En este caso, no es exagerado decir que el mundo entero está mirando», añade.

Hace dos semanas, los tribunales extendieron la tutela legal de Spears hasta febrero de 2021, aunque la autora de «Toxic» reclamó que la función de control recaiga en manos de una abogada especializada y no de su padre, algo que no supone que Spears renuncie «de ninguna manera a su derecho de solicitar la terminación de la misma».

A pesar de que el caso despierta gran atención mediática, Spears nunca se había referido explícitamente al mismo. Todo se remonta al infame año 2007 para la cantante, marcado por un comportamiento errático y problemas con las drogas, acrecentados por el acoso de «paparazzis» tras su divorcio de Kevin Federline y el lanzamiento del disco «Blackout». El padre de Spears tuvo un importante rol en aquellos momentos, asumiendo su tutela cuando en 2008 fue ingresada en un psiquiátrico y perdió la custodia de sus hijos.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación