Helena Costa: el nuevo «míster» tiene nombre de mujer
Es la primera entrenadora de fútbol que alcanza la Segunda división de un banquillo masculino: el Clermont Foot 63 francés
Helena Costa: el nuevo «míster» tiene nombre de mujer
Juegan, estudian, se sacan la licencia y entrenan. Hacen lo mismo que ellos, pero se chocan con un techo que no les deja avanzar. Son entrenadoras de fútbol, relegadas a las categorías inferiores o a los conjuntos femeninos... aunque,no siempre. Ella, Helena Costa, es la excepción que todas esperan que se haga regla ... . Esta portuguesa de 36 años se ha convertido en la primera mujer en dirigir a un conjunto profesional masculino, el Clermont Foot 63, de la Segunda división francesa. Ella es ahora el techo.
Así lo confirmó el club galo: cuenta con Costa para la próxima temporada. Y ella confirma que está más que preparada para tomar esta responsabilidad: como nadie, se graduó con las mejores calificaciones en Ciencias del Deporte en Lisboa, y como todas, pasó los cursos de entrenador y sus correspondientes exámenes. Poco a poco demostró que, desde el banquillo, el fútbol se analiza igual en masculino que en femenino. Por eso llegó a la selección de Qatar, y a la de Irán, después de adquirir confianza y títulos con las categorías inferiores del Benfica y ser ojeadora para el Celtic de Glasgow.
Fue el club escocés el primero en felicitar a Costa por su nombramiento. Acompañó después el mensaje de la ministra francesa de Deportes y de Igualdad, Najat Vallaud-Belkacem: «Bravo al Clermont Foot por comprender que hacer sitio a las mujeres es el futuro del fútbol profesional». Por supuesto, el vestuario del club galo no tardó en comentar la nueva: «Ser el primer equipo masculino entrenado por una mujer será una experiencia única. Tengo ganas de que empiece ya la temporada», confesaba el defensa del Clermont, Anthony Lippini. «Lleva mucho tiempo trabajando en esta profesión. Al principio puede ser un poco raro, pero seguro que solo dura unos días», decía Remy Dugimont en «L’Équipe».
El precedente más cercano lo protagonizó Carolina Morace en 1999, cuando se hizo cargo del Viterbese, de la Tercera división italiana. Duró dos encuentros. «Es muy difícil abrir la puerta en otros niveles más allá de los juveniles», admitía para ABC María Vargas, exjugadora y entrenadora del Atlético de Madrid féminas . «Pasé por esa experiencia y entrenarlos a ellos no era tan diferente a entrenarlas a ellas. Uno de los problemas que tenemos es que todavía no nos creemos que podemos estar ahí, y hacerlo muy bien». Quizá por eso tampoco los equipos femeninos son dirigidos por ellas. En la Primera división española, solo Laura Torvisco y Natalia Astrain han ocupado el banquillo.
El nombramiento de Costa significa un impulso titánico para hacer que esta noticia deje de serlo . Será la primera mujer en sentarse en un banquillo de tan alta categoría masculina. Un escalón más en el camino que iniciaron otras pioneras, como la árbitra Bibiana Steinhaus, en la Segunda división de la Bundesliga y en la Copa de Alemanias; o las asistentes Nelly Viennot, primera en un partido de Liga de Campeones, o María Luisa Villa, en la Liga BBVA. El fútbol es de todos, y cada vez más de ellas.
Ver comentarios