El vestido favorito de Lady Di, vendido por 123.000 euros

El «walk-in closet» de Diana de Gales era como el armario de «Las Crónicas de Narnia»: un mundo de fantasía sin fin . Y las grandes casas de subastas londinenses pueden dar fe de ello. Desde la muerte de Lady Di en 1997, no hay remate de «alto standing» en la capital británica que no incluya un par de lotes «fashionistas» de la difunta exmujer de Carlos de Inglaterra. Este martes se ha subastado uno de los vestidos más icónicos de Di: un diseño exclusivo de Emanuel que la Princesa lució por primera vez en 1986. ¿El precio? 102.000 libras (unos 123.000 euros).

La creación de David y Elizabeth Emanuel (el dúo que también confeccionó el vestido de novia de la Princesa), pertenece a la colección «Diágilev» de la firma, de 1986, inspirada en los montajes escénicos que hizo Léon Bakst para los Ballets Rusos del maestro Diágilev. El vestido, de corte princesa, está bordado con lentejuelas doradas, cristales y perlas que dibujan las típicas formas geométricas ideadas por Bakst a comienzos del siglo XX.

Lady Di vio por primera vez este vestido en un desfile benéfico de la Cruz Roja en 1986. Rara vez la Princesa compraba los modelos que se enseñaban sobre la pasarela. En cambio, solía realizar encargos a medida y pedía que los vestidos fueran nuevos. Pero en esa ocasión, compró el mismo vestido de gala de los Emanuel que vio en el desfile. Fue vista con él en una cena en la residencia del Embajador alemán en Londres ese mismo año. Según Kerry Taylor, la casa de subastas responsable de su venta, el diseño se convirtió en uno de los favoritos de Diana, quien lo volvió a lucir para una función del Bolshói en la Royal Opera House y para el estreno de «007: alta tensión», en 1987.

Sin duda, la «maison» Emanuel fue la preferida de Lady Di en los años 80. La colaboración entre el dúo de diseñadores y la Princesa comenzó con la blusa de chifón que Diana enseñó en el posado oficial con motivo de su compromiso con el Príncipe Carlos (las fotos fueron realizadas por Lord Snowdon), y continuó con el vestido que eligió para su primer acto oficial como futura Princesa de Gales. Sin embargo, el clímax de esta relación llegó en 1981, con el vestido de novia que crearon para ella y que hasta el día de hoy es uno de los más famosos en la historia de la moda.

Kerry Taylor no ha revelado el nombre del comprador del vestido, pero sí ha confirmado que se trata de un museo de América. Tampoco ha querido desvelar la identidad del dueño que lo sacó a subasta, aunque Taylor sí ha dicho que el vendedor «está muy satisfecho porque el vestido será conservado para que otros puedan admirarlo en los próximos años».