Vox lanza en la Región de Murcia su último pulso al PP para entrar en el Gobierno de López Miras

En línea con lo que publicó ABC el pasado fin de semana, durante esta semana se están produciendo contactos, que ambas partes han apostado por blindar hasta que alcancen un punto definitivo, con acuerdo o sin él. Fuentes de ambos partidos constatan que la situación no se ha desbloqueado. Pero también que la negociación sigue adelante. Algo que, tratándose de la Región de Murcia, no es una cuestión menor.

En el tiempo de descuento y como es habitual, Vox tiene centralizada la interlocución en su cúpula nacional. Todas las negociaciones pasan en última instancia por el presidente, Santiago Abascal, por el secretario general, Ignacio Garriga, y por las personas de confianza de ambos. En el PP aseguran que la negociación está en manos del presidente murciano en funciones, Fernando López Miras, aunque la cúpula de Génova maneja la información. Hasta la fecha el líder regional y la dirección nacional coincidían en no aceptar la entrada de Vox en este Gobierno autonómico.

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Fuentes del PP tanto en Madrid como en Murcia y Cartagena atestiguan que el problema siempre ha sido la ambición de Vox sobre la cartera de Agricultura, que gestiona los asuntos que tienen que ver con el Mar Menor y el regadío. Esa cuestión para el Partido Popular sí que es una auténtica línea roja. Una entrada en el Gobierno con una presencia muy limitada, siguiendo el modelo extremeño, se consolida en las últimas horas como una posibilidad.

En ambas formaciones son conscientes de que una repetición electoral no pondría en riesgo el Gobierno regional para la derecha, también estiman que sería muy complicado que el PP, por efecto de la ley electoral, obtuviese mayoría absoluta. El plazo corre, además, en mitad del proceso de investidura de Alberto Núñez Feijóo, que ha fomentado que ambas formaciones experimenten una «nueva etapa» en la que las partes han decido bajar la intensidad.

Estas dos consideraciones son fuerzas que en los últimos días empujan hacia un acuerdo donde el nivel de detalle parece el problema. Ayer, el coordinador general del Partido Popular, Elías Bendodo, mantuvo que las «pretensiones» que plantea Vox en la Región de Murcia a día de hoy son «inasumibles» para López Miras. Pero a la vez consideró que eso no significa que no «se pueda seguir hablando» e insistió en que en toda negociación «hay que ceder».

En Vox no se manifiesta una disposición a ceder. Aunque el PP enarbola el caso de Baleares, el único en el que hasta la fecha los populares han conseguido que la formación de Santiago Abascal no se integre en la estructura del Ejecutivo autonómico.