Sánchez coge aire tras salvar el 5% de gasto que le exigía la OTAN

España entregará «las capacidades pactadas» sin tener que llegar a esa cifra, impuesta por Donald Trump y que en el Ejecutivo consideraban «arbitraria, desproporcionada e innecesaria». Este acuerdo evita escalar hacia una crisis mayor en la cumbre y permite a Sánchez -como se vio en su comparecencia- salir del foco doméstico en el momento de mayor debilidad de la legislatura, con el caso Cerdán abierto en canal y con el PSOE absolutamente roto buscando una salida.

La agenda internacional y el panorama en Oriente Próximo garantizan al presidente un balón de oxígeno durante toda la semana. Este lunes tendrá una aparición junto al expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para reivindicar el 20 aniversario del matrimonio igualitario. También están previstas las declaraciones judiciales del exministro José Luis Ábalos y su asesor de confianza, Koldo García, que dio nombre a la trama de corrupción dentro del PSOE.

Pero el martes Sánchez ya viajará a La Haya para acudir a la cena de líderes de la Alianza Atlántica, y el miércoles tendrá lugar una extensa jornada de trabajo. El acuerdo ya no parece tener riesgos. Después, jueves y viernes, se desplazará al Consejo Europeo en Bruselas. En Moncloa centrarán todos los esfuerzos en la situación internacional. Un registro -exhibir un perfil propio fuera de nuestras fronteras- que ha sido la mayor fortaleza política del presidente durante mucho tiempo. Pero, según señalan fuentes europeas, llega a estas citas en un momento de «debilidad enorme» y con su credibilidad «muy tocada».

Noticia Relacionada

Sánchez, el rey desnudo

Juan Casillas Bayo

Los socios de investidura creen que el presidente está mal asesorado y que su reacción al caso Cerdán agrava la crisis. En Podemos ya hablan de «legislatura finiquitada»

El ambiente, insisten, es de mucha «hostilidad» para el jefe del Ejecutivo. Desde hace dos semanas las cabeceras más influyentes en Europa -'The Economist', 'The Times' y 'Politico', publicación esencial en los pasillos del Parlamento Europeo- retratan el momento de extrema gravedad que atraviesa el presidente. En todos los titulares aparece la palabra corrupción y las delegaciones del resto de países preguntan casi a diario cómo evoluciona la situación.

Sánchez ha dedicado muchos esfuerzos en estos años a consolidar su imagen en Europa y ha podido firmar éxitos y sintonía con la presidenta de la Comisión, la popular Ursula von der Leyen. Incluso en mitad de incendios en la política nacional, azuzados por el PP en las instituciones comunitarias.

El partido de Alberto Núñez Feijóo ha reclamado al Gobierno europeo actuaciones para tratar de frenar algunas decisiones, como la ley de amnistía. Y a pesar de la presión y de los momentos delicados, en Bruselas insisten en que «nunca» se había visto un escenario similar. La sensación de que la legislatura puede acabar en cualquier momento también ha llegado a la capital comunitaria.

El acuerdo con la OTAN evita un desenlace que podía haber sido muy complicado para España. El Gobierno tenía trazada su estrategia desde hace tiempo porque veían «inasumible» el objetivo del 5%. Lo que el Ejecutivo quería era flexibilizar el porcentaje de gasto, insistiendo en que lo realmente importante era cumplir con las capacidades requeridas. Y eso es lo que habría pactado con Rutte.