Entrevista
Carlos Carrizosa: «Resulta inevitable un repliegue de Ciudadanos y que su centro de gravedad sea Cataluña»
El líder de los liberales catalanes expone en ABC su visión del partido con el objetivo puesto en las elecciones de 2024, europeas, y las de 2025, autonómicas en Cataluña
Carlos Carrizosa, líder de CS en Cataluña, posando para ABC en las escaleras nobles del Parlamento autonómico
Ciudadanos no se presentará a las elecciones del 23J. Fue la respuesta al mal resultado electoral de las pasadas elecciones municipales y autonómicas parciales de mayo. La formación liberal se centrará en la cita con las urnas de 2024 para el Parlamento Europeo. Unos ... meses después, en 2025, están previstas las elecciones autonómicas en Cataluña, un reducto para Ciudadanos (seis diputados) al más puro estilo del mundo galo creado por Goscinny y Uderzo. Carlos Carrizosa, su líder autonómico catalán, apuesta por volver a los orígenes y recuperar aire en los cuarteles de invierno.
¿Qué valoración hace del resultado del 28M?
El 28M se ha votado muy en clave nacional y eso ha motivado una subida del PSOE, del PP y de Vox. Ha sido un anticipo de lo que iban a ser las elecciones generales, y se ha configurado como unas elecciones plebiscitarias: Sánchez, sí; Sánchez, no. Y ahí nos quedamos un poco descolgados. Esa ha sido la razón por la que no hayamos querido concurrir a unas elecciones nacionales, las del 23J, fuertemente polarizadas.
¿Por qué no vale la pena presentarse al 23J?
Por responsabilidad y por respeto a nuestros votantes. Porque en unas elecciones fuertemente polarizadas, en las que mucha gente piensa que si Sánchez puede continuar, no es tan malo y otros, que piensan que en absoluto debe continuar, el voto a Ciudadanos no es relevante en la decisión de la cuestión planteada. Las encuestas nos dejaban fuera del ámbito de decisión. En ese caso, es pedir a tus propios votantes un acto de fe. Cuando te votan solo porque te quieren, te tienen simpatía, pero no porque el voto sea útil, es pedir demasiado a los votantes.
Eso da la sensación de que Ciudadanos no tiene sentido, no es un partido útil.
Esto ya ha pasado en otros países y también en España ha habido otros partidos que han tomado esta misma decisión en este contexto concreto, polarizado del año 2023 y del mes de julio. A nivel nacional, ha sido una decisión correcta y responsable. Ahora bien, el partido continúa con representación institucional, con concejales, con seis diputados en Cataluña, con uno en Castilla y León y con otro en el País Vasco. Por lo tanto, nuestros próximos retos son las elecciones europeas y las elecciones catalanas.
Algunos miembros destacados de Ciudadanos acusan a la dirección nacional de quedarse con el partido e incluso con el dinero. ¿Usted qué opina?
La decisión de no presentarse a las elecciones del 23J fue tomada por el órgano que debe tomarla y, además, por abrumadora mayoría. Por lo tanto, aquellos que discutan estas decisiones, que lo pueden hacer porque existen argumentos a favor de que un partido se presente a las elecciones, pero también en determinadas circunstancias, como las actuales, hay argumentos en contra de que se presente, les pediría, a quien se diga afiliado responsable, que respete las decisiones de los órganos estatutarios. Porque, aunque no estén de acuerdo con ellas, es normal que, en ciertas circunstancias, parte del partido, en este caso, buena parte de la dirección, creyese que era mejor no presentarse.
Pero las acusaciones son muy graves.
Las acusaciones son ridículas y, además, son susceptibles de que se incoe un expediente disciplinario por la forma en la que se han hecho. Me parece intolerable que haya compañeros que decidan atacar con argumentos tan poco finos a la dirección de su partido, que toma una decisión absolutamente plausible y dentro del ámbito de sus competencias.
¿A quién votará usted el 23J?
No voy a decir qué es lo que voy a hacer, porque entiendo que mi misión, como dirigente de Ciudadanos, es dar libertad de voto, como no puede ser de otra forma. Y cualquier acción o cualquier decisión que yo pudiera tomar podría contaminar esa libérrima libertad de voto que nosotros damos a nuestros compañeros y simpatizantes.
Es un poco contradictorio no presentarse a las elecciones y no decir lo que va a hacer el 23J.
No lo veo contradictorio cuando tienes unas responsabilidades. Cualquier liderazgo debe ser un liderazgo responsable y yo no puedo, en absoluto, inclinar la balanza. Lo que sí le puedo decir es que un dirigente de Ciudadanos difícilmente puede votar a aquellos proyectos políticos con los que compite y que son bien diferentes del nuestro. Nosotros, si tuviéramos proyectos políticos asimilables, estaríamos ya en otro partido, pero como creemos que nuestro proyecto es bien distinto y mejor al del resto, pues usted comprenderá que no pueda recomendar votar a otros proyectos.
¿En qué situación queda el partido en Cataluña? ¿Le beneficia o le perjudica la decisión de no presentarse el 23J?
Creo que beneficia no presentarse a unas elecciones en las que forzosamente nuestros resultados no podían ser buenos, porque, como le he dicho, se votará en clave plebiscitaria: Sánchez, sí; Sánchez, no. El voto útil va a arrastrar más voto y las encuestas van a arrastrar el voto. Por lo tanto, creo que no era el momento. Ahora bien, en unas elecciones europeas que se han de celebrar dentro de un año, en el que el mapa político español se habrá aclarado, en ese momento, el proyecto liberal tiene todo el sentido. Y también lo tiene en Europa, porque en Europa, como usted recordará, está gobernando una gran coalición de socialdemócratas, populares y liberales. Por lo tanto, tendrá todo el sentido, en una circunscripción única, y no en 52 circunscripciones cada una de ellas con una ley que prima a dos partidos más votados y, como mucho, a un tercero, en las que es muy difícil sacar representación. En cambio, en una circunscripción única, los votos que hemos sacado en las pasadas elecciones autonómicas y municipales serían suficientes para obtener representación en el Parlamento Europeo. Eso puede ser ya un signo de recuperación de nuestra marca, y podemos concurrir a unas elecciones autonómicas en otro contexto bien diferente. También en un contexto nacional bien diferente al que tenemos hoy día los catalanes.
Le pregunto por Cataluña. ¿Hay que cambiar el liderazgo?
En absoluto. Creo que Ciudadanos, en Cataluña, tiene un equipo que lleva introduciendo caras nuevas, como ha habido en estos últimos años, pero funcionando desde el año 2006, con muchísimos militantes muy antiguos. El contexto de Ciudadanos en Cataluña, además de ser donde nació el partido, es un contexto de lucha contra el nacionalismo catalán en el que jamás hemos retrocedido ni un ápice. Y si usted me lo permite, además, continuamos siendo esenciales, porque está clarísima la voluntad del PP, con Feijóo, un líder regionalista gallego, de llegar a acuerdos con el independentismo. El hecho de que esté Ciudadanos en la política catalana supone poner el pie en la pared a estos segundos pactos del Majestic que se avecinan de la mano de Feijóo y que no tardaremos mucho en ver.
Carlos Carrizosa, en uno de los jardines del Parlamento de Cataluña, posando para ABC antes de la entrevista
Si Ciudadanos obtuviese un mal resultado en las europeas, ¿cómo afectaría esto a la organización en Cataluña? ¿Existe la posibilidad de que el partido se centre solo en Cataluña?
Por supuesto, creo que resulta inevitable un repliegue de Ciudadanos en Cataluña y que el centro de gravedad descanse en Cataluña, sin perjuicio, desde luego, de que el partido continúe prestando servicio y queriendo levantar la bandera del liberalismo en el resto de España. Estoy convencido de que llegarán momentos mejores para nuestro espacio político. Estoy absolutamente convencido de que después de un espacio de radicalización por la izquierda con Sánchez, en el caso de que el PP tenga que gobernar con Vox, habrá otro periodo de radicalización, pero por el otro lado. Estoy convencido de que los españoles volverán a querer y a buscar el espacio del centro que representa Ciudadanos.
¿Ha hablado con Nacho Martín Blanco después de su fichaje por el PP?
Sí, brevemente.
¿Cómo le ha sentado su marcha?
Tengo una buena amistad con Nacho Martín Blanco y a mí lo que me interesa más es ver cómo influye que un líder importante de Ciudadanos, su portavoz del Parlamento de Cataluña, se pase inopinadamente al PP. El mensaje es muy claro: el PP, aunque se disfrace de Ciudadanos, aunque fiche líderes de Ciudadanos, es el PP. Y Ciudadanos es ese partido reformista que nació en Cataluña en el año 2006, precisamente, por las carencias del PP, para pedir reformas en política, evitar la corrupción y poner el pie en la pared ante una inacción escandalosa en Cataluña de los populares. Pueden votar a una lista que encabece un exlíder de Ciudadanos, pero siguen votando a ese antiguo PP. Y eso es lo que a mí me interesa, que aunque el PP quiera inducir a confusión a sus votantes, aquello que decía un líder de Ciudadanos cuando era de Ciudadanos no es el discurso ni los objetivos políticos que tiene el PP.
Pero Martín Blanco dijo, en su despedida, que Ciudadanos ya no era una herramienta útil.
Fíjese que eso que dijo el señor Martín Blanco lo dijo en el ámbito de unas elecciones en las que nosotros hemos rehusado presentarnos, precisamente porque creemos que en este momento político el voto a Ciudadanos no iba a ser útil para la sociedad española. En ese aspecto, el señor Martín Blanco ha decidido que su acción política se desempeñe en aquel partido que él cree que, en este contexto, sí que puede ser útil en estas elecciones. Otra cosa será cuando vayamos a las elecciones autonómicas.
¿Por qué sí será útil, entonces, el voto a Ciudadanos?
Por lo que le he dicho antes, porque, por ejemplo, todos estos vaivenes del PP, que si apoyo a Trias, o no, ¿por qué cree usted que al final el PP acabó votando a Collboni? Porque está Ciudadanos. El hecho de que Ciudadanos esté en Cataluña evita que el PP se eche descaradamente en los brazos de la parte pudiente y nacionalista de la sociedad catalana que es el deseo y el anhelo de Feijoo.
¿Es factible que Ciudadanos, en Cataluña, haga un giro y se dirija al votante socialista o socialdemócrata?
Frecuentemente, los partidos constitucionalistas cometen el error de tratar de engrandecerse a costa de la desaparición de otros partidos constitucionalistas. Esta batalla que ha llevado el PP en Cataluña, para tratar de suprimir a Ciudadanos y sustituirnos, la veo como una inconsciencia política y mala estrategia para el constitucionalismo. Lo que tenemos que hacer es movilizar el voto que muchas veces no es un voto extremista, que es un voto bastante despolitizado y que se va a la abstención. El gran problema de Ciudadanos es la abstención. No quiero crecer a costa del PP ni a costa del PSC. Quiero crecer a costa de todos esos ciudadanos que están desengañados de la política, que piden reformas, que no comulgan con el nacionalismo y que nos llevaron a la victoria con más de un 80% de participación en las elecciones de 2017. Estoy convencido de que muchos ciudadanos desengañados no quieren votar al PP ni al PSC porque creen que va a ser siempre igual. Y tienen razón, porque el bipartidismo, en lo que está ahora también Feijóo, es programar una España en la que el chantaje nacionalista continúe. Ciudadanos es la garantía de que esto no va a ocurrir. Oiga, bienvenidos sean los votantes del PSC y del PP, pero bienvenidos, sobre todo, todos aquellos que se están inhibiendo de la política y que podrían dar un vuelco y cambiar verdaderamente la política catalana el día que se movilicen.
Pero el equilibrio entre fuerzas políticas independentistas y las que no lo son es casi siempre el mismo. Básicamente, solo hay trasvase de votos dentro de esos dos espacios.
El mapa político cambia continuamente y ahora va a cambiar radicalmente, en lo nacional, y también va a cambiar en Cataluña. Es muy posible que empecemos a ver la concreción de un tripartito del PSC y los comunes con ERC.
Con más razón para buscar el voto de izquierdas que no es nacionalista, ¿no?
Claro, efectivamente. Pero eso no quiere decir que nosotros vayamos a buscar ese electorado, sino que, probablemente, vendrá, pues no quiere un tripartito. Y no quiere votar al PP o a Vox. Claro que nos puede venir, pero los últimos éxitos del PP en toda España son en clave plebiscitaria de un cambio político. Veremos si ese voto se mantiene, porque el PP en Cataluña lleva mucho tiempo postrado. Veremos si en unas elecciones autonómicas, en las que esté Ciudadanos, recupera voto o no.
¿Usted se presentará a liderar el partido en Cataluña en las próximas primarias?
Dependerá de lo que quieran mis compañeros. Estoy siempre a disposición de mi partido. Si me piden que me presente, lo haré. Si creen que hay candidatos alternativos, no haré ruido. No descarto, en absoluto, presentarme a unas primarias.
¿Con quién le gustaría hacer el equipo?
Por supuesto, con nuestros eurodiputados catalanes, como Jordi Cañas y Eva Poptcheva. Tengo mucho interés en que participen en el proyecto de Cataluña. Pero también hay relevo en Cataluña, con cuadros medios expertos. Y hemos tenido candidatos en las municipales muy buenos que podrían entrar a formar parte de un grupo parlamentario.