PSOE y Podemos eliminarán la sedición por la vía de urgencia: objetivo final de año

Al optarse por una proposición de ley de los grupos parlamentarios los plazos se acelerarán. En el caso de un proyecto de ley del Gobierno primero se aprueba el Anteproyecto, después hay un plazo para que los órganos consultivos emitan sus dictámenes. Que aunque no son vinculantes sirven para mejorar el texto desde el punto de vista jurídico. Luego el Gobierno aprueba el Proyecto de Ley y ya llega al Congreso.

Pero con la vía escogida todos estos pasos previos se eliminan. La Mesa podría calificar ya la próxima semana esta reforma para que sea elevada al pleno para su toma en consideración. Está garantizado que se supere la mayoría absoluta. Entonces pasaría a Comisión para elaborar la ponencia y después volvería al pleno del Congreso y luego al Senado para su aprobación definitiva. Esta vía de por sí ya ahorra meses respecto al proyecto gubernamental. Y por el trámite convencional podría llevar a una aprobación definitiva en torno al mes de marzo.

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Sin embargo, fuentes parlamentarias han confirmado que los dos grupos parlamentarios han solicitado que la medida se tramite por la vía de urgencia. El portavoz socialista en el Congreso, Patxi López, apuntaba ayer que el objetivo es que esté aprobada «cuanto antes». Mientras que el de Unidas Podemos, Jaume Asens, abría precisamente la puerta a que pueda ser antes de fin de año. Para que sea así tiene que aplicarse ese procedimiento de urgencia que recorta a la mitad los plazos de tramitación.

Este procedimiento de urgencia está regulado en los artículos 93 y 94 del Reglamento del Congreso de los Diputados. «A petición del Gobierno, de dos Grupos Parlamentarios o de una quinta parte de los Diputados, la Mesa del Congreso podrá acordar que un asunto se tramite por procedimiento de urgencia», señala el artículo 93.1.

Esta solicitud ya se ha producido. Y dado que el grupo parlamentario socialista dispone de cupo para la presentación de iniciativas legislativas en estos momentos la Mesa del Congreso podría calificarlo ya el próximo martes. En el artículo 94 se especifica que en esta vía de urgencia «los plazos tendrán una duración de la mitad de los establecidos con carácter ordinario».

Una vez la norma es aprobada por el Congreso de los Diputados tiene que pasar al Senado. Donde también se aplicaría una vía de urgencia. En este caso porque lo mandata la Constitución. El artículo 90.3 señala que «el plazo de dos meses de que el Senado dispone para vetar o enmendar el proyecto se reducirá al de veinte días naturales en los proyectos declarados urgentes por el Gobierno o por el Congreso de los Diputados».

Desde ERC y Unidas Podemos se quiere tener en vigor el nuevo Código Penal lo antes posible porque ven un rédito claro políticamente en ello y porque quieren acelerar las consecuencias para los condenados, inhabilitados y fugados que se deriven de esta legislación más laxa.

Al PSOE, por su parte, le interesa que esta cuestión se consume lo más rápido posible para intentar que se amortice pronto desde el punto de vista de los electores. En las filas socialistas confían en que su electorado pueda entender la decisión y no castigarla como aseguran que ha sucedido con los indultos.