Podemos pide al juez que incorpore al caso Kitchen los audios de Villarejo y Cospedal

En su escrito, al que ha tenido acceso ABC, la formación morada exige al juez que aclare por qué este material no ha sido incorporado al sumario a pesar de la «evidente relevancia para el objeto de la investigación» y explique si hay más grabaciones que estén en posesión de la unidad policial de apoyo al Juzgado.

«Se deducen con total nitidez prácticas reiteradas y sistemáticas de órganos policiales dependientes del Ministerio del Interior de «fabricación» de información falsa contra el partido político al represento y a sus dirigentes, para su posterior divulgación en determinados medios de comunicación. Hechos extremadamente graves y que sin duda tienen una evidente conexión con la presente causa«, argumentan.

En el escrito, Podemos denuncia que en esos audios, «Villarejo presuntamente pone en conocimiento de la entonces Ministra de Defensa unas supuestas pesquisas llevadas a cabo por determinados mandos policiales, al margen de todo control judicial, consistentes en fabricar informes y pruebas falsas con las que buscan la «ruina» de Podemos y a varios de sus dirigentes».

Esas informaciones, fueron después entregadas, argumentan, «desde esas mismas instancias policiales a determinados medios digitales, todo ello con el indisimulado objetivo de desprestigiar a rivales políticos en un contexto de contienda electoral».

La formación califica de «reveladoras» la conversación de Villarejo con el ex jefe de la UDEF, José Luis Olivera, quien afirma que «tampoco es muy costoso el meterle una cuenta a Pablo Iglesias de hace 5 años y luego que expliquen», o con «profesionales de la comunicación como Mauricio Casals o Antonio García Ferreras, el cual reconoce expresamente en dichas grabaciones que las informaciones que se emitieron desde su medio de comunicación eran falsas«, exponen.

Para Podemos, los hechos son «extremadamente graves», y entienden que el conocimiento y participación de María Dolores de Cospedal, y del exministro del interior, Jorge Fernández Díaz, es «difícilmente discutible a la vista del contenido, pues de él «dependía jerárquicamente toda la estructura policial encargada de fabricar la falsa información«.