«Yo pago putas a Juan Bernardo cada vez que viene a Madrid»

Se trataba de Antonio Bautista, dedicado al sector de las energías renovables. Buscaba ampliar su negocio en las islas y le habían prometido, entre otras cosas, que podría optar a ayudas para implementar placas solares en Canarias. Pagó viajes, hoteles y noches de fiesta en Madrid, así como dinero en efectivo o en tarjetas monedero. Le llamaban «el cura» o «el curita».

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Isabel Vega

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El audio tiene fecha de noviembre de 2020 y es sólo uno de los encuentros grabados por el mediador, que atesora miles de pistas de audio con las conversaciones de toda la trama. «Yo no se lo digo a Juan Bernardo, pero... quiere hablar contigo y quiere hablar conmigo porque ha llegado el momento de buscar filas. Yo sé que a ti no te gustan las putas. Me da igual, te bromeo, pero tú escuchas a los otros, cómo ellos dicen: ¿oye, te acuerdas anoche?», le plantea, mencionando directamente al diputado.

«Se puede dar el escenario... el de los cien mil no se puede dar porque está arreglado, está pactado con el Gobierno. El del medio millón está tratado. Estos dos en general se dan, en positivo», le dijo, alimentando sus expectativas.

El mediador, que ha declarado hasta tres veces en sede judicial, afirmó ante la magistrada que tenía un contacto en Madrid que le conseguía de todo, «incluso traslados». Y así, a las visitas que promovía de empresarios al Congreso de los Diputados, donde les recibía el socialista canario, le seguían las fiestas: «Era protagonista el consumo de alcohol, de cocaína, la contratación de prostitutas y el consumo de viagra».

Dio otros detalles, como que procuraba que todo fuese «muy discreto para salvaguardar la imagen de Fuentes Curbelo». Sin embargo, él daba cuenta de todo a golpe de grabaciones y fotografías.

Como él mismo reconocería en un audio, las fiestas y las «putas» era un peaje a pagar para recibir favores. «Esto no es delito -llegó a decir-, pero estamos sobornando»,