El número tres del PSOE se vio con Koldo García el mes del chivatazo a los investigados de la trama

Entre 2021 y 2023, en el periodo previo a la detención de García y en el que Ábalos deja de ser ministro y número tres del PSOE, Cerdán ha detallado que continuó viendo a Ábalos con cierta frecuencia, pero que a García solo esas dos veces: cuando dejó el Ministerio de Transportes y en octubre del 2023. Él no ha explicado por qué se citó con García ese mes, pero tampoco han incidido en ello los senadores del PP que en ese momento lo interrogaban. La fecha es la misma en la que según la UCO se avisó a los implicados de que estaban siendo investigados.

La comisión de investigación del Senado por el caso Koldo continúa su trabajo. La Cámara Alta intenta esclarecer hasta qué punto afecta al Gobierno y al PSOE la trama de corrupción por el cobro de comisiones ilegales en la venta de mascarillas a administraciones públicas durante la pandemia del Covid-19. En la sala Clara Campoamor, este martes ha desfilado por el órgano el secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán. Fue él quien favoreció el salto de Koldo García a Madrid, donde se le contrató como chófer de José Luis Ábalos en 2017, cuando era este el número tres del partido, y fue ascendiendo para pasar de asesor en el Ministerio de Transportes a consejero de Renfe.

En el sumario de la trama, al que tuvo acceso ABC, consta un informe de la UCO en el que se recoge una conversación del 17 de octubre del 2023 entre García y Joseba, su hermano, en la que el exasesor de Ábalos dice: «Ahora viene la Guardia Civil a verme y vienen también de la UCO para explicarme que no me pusieron el seguimiento a mí, porque si era en el seguimiento de Izaskun y era al padre... detrás de joder a José Luis, detrás del secretario de Estado, detrás del... hay, me parece que son veintisiete personas las cuales están siguiendo».

La UCO recoge que, en primer lugar, se observa que García informa a su hermano de que se va a reunir con agentes de la Guardia Civil para que le expliquen lo sucedido. «De estas afirmaciones de Koldo se infiere que sería conocedor a través de fuentes de la propia Guardia Civil de que existe una investigación sobre su persona, en la que habría un total de veintisiete investigados», concluye la Benemérita en su informe.

Cerdán ha respondido a las preguntas de los senadores durante noventa minutos, con tranquilidad, y en un tono mucho más sosegado que el empleado por el primer secretario del PSC y exministro de Sanidad, Salvador Illa, hace solo seis días. A preguntas de la senadora de Unión del Pueblo Navarro (UPN), Mar Caballero, y de los populares Alejo Miranda de Larra y Gerardo Camps, Cerdán ha garantizado que no existía «ninguna» relación entre el ahora presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y García. Todo ello, a pesar de que el salto de García a Madrid, en 2017, coincide con el regreso de Sánchez a la Secretaría General del PSOE, tras ser defenestrado por su partido solo unos meses antes, y de que fue García, por encargo de Cerdán, quien custodió los avales de Sánchez en aquellas primarias.

El ahora secretario de Organización del PSOE, que sucedió a Ábalos en el cargo en 2021, cuando este fue destituido como ministro de Transportes y número tres de los socialistas, ha admitido su relación de amistad con Ábalos, pero no así con García. De este último ha contado que se afilió al partido entre finales del 2010 y principios del 2011 y que le dio su apoyo porque montó una agrupación socialista en Huarte (Navarra) en un tiempo en el que era complicado afiliarse a formaciones no nacionalistas según en qué territorios. Constan al menos dos imágenes de Sánchez con García, pero Cerdán ha asegurado que se trataba de actos de partido en los que el dirigente socialista se fotografía con todos los afiliados que se lo piden.

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«Yo soy la persona que trae al señor Koldo García a custodiar los avales el 2 de mayo del año 2017», ha reconocido Cerdán, pero también ha negado que fuese «íntimo amigo» de Sánchez y que siquiera apareciese «en ningún coche montado con él». Tampoco era, según él, el «pupilo» de Cerdán ni «nadie dentro del organigrama del PSOE». El secretario de Organización socialista ha admitido que comió varias veces con él, en compañía de su amigo Ábalos, pero ha dicho que García era entonces asesor en el Ministerio de Transportes y que no compartían con él ninguna información orgánica. También ha negado haber hablado o haberse reunido con García desde su detención en febrero.

Sí acudió Cerdán al domicilio de Ábalos cinco días después, el 25 de febrero, y habló el 26 de febrero con él para comunicarle la resolución de la Ejecutiva Federal del PSOE, que optó por suspender de militancia al exministro de Transportes por la responsabilidad política derivada de la presunta corrupción de García. Esa es la última vez que Cerdán se ha comunicado con su amigo Ábalos, según ha dicho este martes en la comisión de investigación del Senado.

«Le parecía injusto. Nos dijo que nos estábamos saltando el código ético y que no entendía qué responsabilidades podía tener por las contrataciones de Koldo», ha explicado Cerdán, sobre su conversación con Ábalos, a preguntas del popular Camps. El 'Código Ético y de Conducta' del PSOE establece que cualquier afiliado sobre el que se abra juicio oral por delitos de corrupción debe renunciar voluntariamente a la militancia y dimitir de su cargo público si lo tuviere. Ábalos, en este caso, no ha sido ni siquiera citado como investigado en el caso Koldo, por el que sí ha sido detenido e imputado quien fue su mano derecha en la Secretaría de Organización del PSOE y en el Ministerio de Transportes.

La comisión se ha desarrollado con normalidad, en un tono cordial dentro del rifirrafe político, y con escasas intervenciones del presidente, Eloy Suárez (PP), para llamar al orden. Solo han participado tres grupos parlamentarios, Mixto (UPN), Izquierda por la Independencia (ERC) y Popular, y de hecho el senador republicano Joan Queralt ha felicitado con cierta sorna al compareciente porque, ha dicho, lo ha hecho «mucho mejor» que Illa. Camps le ha preguntado a Cerdán, para coronar la sesión, si se planteó dimitir o tomarse al menos «cinco días de reflexión» -una pulla a Sánchez por la carta que escribió el miércoles en la que amagó con renunciar al cargo-.

«Sin usted Koldo no habría llegado a ningún sitio», ha argumentado el popular. «Mi responsabilidad política consiste en tomar medidas cuando hay atisbo de irregularidad o corrupción. Así lo he hecho, a diferencia del PP, que lo que hizo fue echar a su presidente -en referencia a Pablo Casado- y traer a [Alberto Núñez] Feijóo para tapar y callar», ha contrarrestado Cerdán, poniendo el punto y final a una sesión menos tensa que la protagonizada por Illa la semana pasada. El lunes será el turno de Ábalos.