Pamplona ya es una fiesta

«No nos rendiremos. ¡Aúpa Osasuna!» ha sido la única innovación de Zabalza en el momento de lanzar el chupinazo. Así ha hecho referencia a la sanción que ha impuesto la UEFA al club rojillo que, de momento, les deja fuera de las competiciones europeas. En realidad, el club pamplonés no era un novato en esto de protagonizar el inicio de las fiestas de San Fermín. En el año 2000 también tuvieron la responsabilidad de lanzar el cohete, en aquella ocasión como premio a haber subido a primera división. Hoy minutos antes de las doce del mediodía había jugadores que se confesaban tan nerviosos como en los momentos previos a los partidos.

Zabalza ha querido que el protagonismo fuera para todo el equipo y por eso, después de lanzar su cohete, ha cedido el puesto a Jagoba Arrasate, entrenador del club, y al resto de jugadores que uno a uno han ido lanzando el resto de chupines. El público les ha correspondido con cánticos de apoyo al equipo. «Alé Osasuna, alé, alé», han coreado al unísono desde una abarrotada plaza del Ayuntamiento en los primeros compases de la fiesta.

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En realidad, para la mayoría de las miles de personas que estaban allí, o en la también abarrotada plaza del Castillo la juerga había empezado mucho antes. Prueba de ello eran las camisetas blancas que a las once de la mañana ya lucían un elocuente color rojo vino. También se han podido ver las ya tradicionales pelotas gigantes saltando de cuadrilla en cuadrilla.

Tampoco han faltado los que utilizan el chupinazo para lanzar sus reivindicaciones. Minutos antes de las doce del mediodía se desplegaba en mitad de la plaza una ikurriña gigante y una pancarta a favor del acercamiento de presos de ETA. Varios de los que estaban allí han coreado «UPN kanpora (fuera en euskera)» cuando la corporación municipal estaba a punto de hacer acto de presencia en el balcón.

Sin embargo, nada de eso ha logrado empañar el buen ambiente y la emoción que se respiraba dentro del consistorio. Una de las más emocionadas era Cristina Ibarrola, recién estrenada en las labores de alcaldesa. El calendario ha decidido que los Sanfermines 2023 sean su estreno en el cargo y por eso esta mañana le costaba esconder la ilusión. Ha confesado a los medios de comunicación estar «emocionada» por un momento que «no olvidará» nunca.

Porque los sanfermines son una de las fiestas por excelencia en España. También aspira a ser una de las más seguras, a pesar de las grandes masificaciones que se viven estos días. De ello se encargarán los más de 2.400 agentes de Policía Municipal, Policía Foral, Guardia Civil y Policía Nacional que forman el dispositivo de este año. También se ha puesto en marcha una pestaña específica en la App Alertcops para mejorar aún más la seguridad ciudadana.

El dispositivo ya se ha dejado ver esta misma mañana en el centro de Pamplona. A primera hora la policía ha desalojado la plaza del Ayuntamiento por completo para controlar los accesos y vigilar que nadie accedía con elementos peligrosos. «Si vas al chupinazo recuerda: no se pueden introducir palos, envases y vasos de vidrio, latas cerradas o cualquier elemento que pueda originar daños directa o indirectamente», recordaba la Policía Municipal de Pamplona en redes sociales. También han vigilado que nadie portara huevos, globos con pintura o cualquier objeto que pudiera manchar las fachadas.

Algunos de esos agentes de nuevo han tenido que emplearse a fondo inmediatamente después del chupinazo. Cuando el reloj marcaba las doce y veinte del mediodía han logrado hacer hueco a los músicos de La Pamplonesa y a los gaiteros para entonar el ‘Ánimo pues’. «Si no tienes un duro no te hace caso nadie» ha comenzado a corear la multitud, una sintonía que ha dado inicio a las más de 200 horas de fiesta y los 500 actos que se han programado en los sanfermines de este año.