La escena no puede ser más cruel. La muerte anunciada y en directo de un perro ante los ojos atónitos de los vecinos. Durante 4 días, atado con dos cuerdas, sin agua y al sol. Poco a poco se va deshidratando sin que sus dueños ... hagan nada. Alguien se acerca, sube las escaleras, pero ignora los ladridos desesperados. También el ayuntamiento. La policía local fue varias veces a la casa, pero nadie les abrió la puerta. En un comunicado la Concejalía de protección animal asegura que no pueden entrar en la vivienda si nadie les abre. El caso está denunciado, los animalistas confían en que una puerta cerrada no vuelva a justificar una muerte.
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