Gallardón: «Mi lugar es el Parlamento o las instituciones»

Figurar en las encuestas entre los políticos mejor valorados no le engaña: «Si estuviera en el Congreso haciendo oposición, seguro que no tenía esa valoración tan buena; yo no me hago trampas en el solitario».

A su juicio, el enemigo del PP «no es el PSOE; es la crisis», de la que se tiene que salir «diciendo la verdad, y generando estabilidad y confianza», lo contrario de lo que ha hecho, a su juicio, Rodríguez Zapatero. «El PP ya se encontró en el Gobierno de España con un 22 por ciento de paro, y creó cinco millones de empleos».

A quien le criticaba el liderazgo de Rajoy, le contestaba: «Estamos muy acostumbrados a personificar, pero yo creo en los proyectos; no creo que el fracaso actual sea responsabilidad personal de Zapatero, sino que ha fracasado el proyecto del PSOE, que está en decadencia».

Las alternativas del PP, desgranó, pasan por «controlar el déficit, reestructurar el sistema financiero, que las cajas ganen en independencia y sean reguladas por el Banco de España, abrir créditos a las familias, y una unidad de acción del Gobierno central, las comunidades y los ayuntamientos».

Respecto a la prohibición del uso del burka, se mostró partidario de «lo que hoy ha aprobado el Senado, es decir, que se regule», aunque recordó que «ni con casco de moto ni con un pasamontañas se puede entrar en un espacio público, porque la identificación es uno de los elementos de seguridad y es uno de los límites que la propia Constitución establece al ejercicio o manifestación de cualquier tipo de actividad religiosa». No obstante, se preguntó si el uso de esta prenda por las mujeres es voluntario o una imposición: «La dignidad de la mujer tiene que estar por encima de todo».

Sobre la dimisión de Sergio Gamón —acusado de espiar a su vicealcalde, Manuel Cobo—, el alcalde eludió pronunciarse: confía, dijo, en la justicia, porque «los políticos debemos tener la prudencia de no intevenir cuando hay un sumario abierto».

Respecto a la capital, defendió la limitación de velocidad en los túneles de la M-30 porque «ha salvado muchas vidas en Madrid», y negó que las multas se impongan para recaudar: «Yo las cambiaría por retirada de puntos del carné». No es partidario de una tasa a la banca porque «poner nuevos impuestos en medio de una crisis puede crear un retroceso». Sobre el alto gasto en el nuevo Ayuntamiento de Cibeles, recordó que trasladarlo allí «fue una propuesta del PSOE». Y su espina, «que Madrid sea ciudad olímpica. Si no lo consigo yo, lo hará otro alcalde».