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La violenta banda que se hizo rica reventando cajeros con explosivos

Los encartados, que ya están en prisión, se apoderaron de cientos de miles de euros

Uno de los cajeros destrozados por la banda en Madrid POLICÍA NACIONAL
Carlos Hidalgo

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La Policía Nacional ha echado el guante a dos de los delincuentes que, desde hace meses, venían reventando cajeros automáticos de la capital utilizando explosivos. Estos sujetos, muy jóvenes y con numerosos antecedentes , se habrían apoderado de cientos de miles de euros con este «modus operandi». Se investiga, además, si están detrás de otros sucesos similares ocurridos el año pasado, alguno también en la periferia, como la localidad de Majadahonda. El juez que instruye el caso, esta vez sí, ha decretado el ingreso en prisión de ambos arrestados.

El Grupo XXI de la Brigada de Policía Judicial de Madrid , experto en robos con fuerza, bautizó la investigación como operación Barreno, por razones obvias: estos consortes del crimen se dedicaban a introducir material explosivo para hacer «abrir» los cajeros, que siempre eran del Santander.

El primero de los casos que ahora se les imputa lo adelantó ABC el pasado mes de junio. El día 3, hicieron saltar por los aires el dispensador del número 54 de la calle de Suecia, en el barrio de Las Rosas (San Blas-Canillejas), a las 6 de la mañana. Se hicieron con unos 70.000 euros en efectivo.

El 8 de julio hicieron doblete: primero, en un banco de la avenida de los Andes (distrito de Hortaleza) y luego en Ventisquero de la Condesa (Fuencarral-El Pardo). En aquellas dos ocasiones, se llevaron 150.000 euros , indicaron a este periódico fuentes de la investigación.

Pero el último golpe no les salió bien. Ocurrió el 12 de agosto. Volvieron a las andadas, esta vez en una sucursal de la calle de Arturo Soria, en Ciudad Lineal. La pareja logró hacer saltar por los aires el cajero, pero fue sorprendida «in fraganti» por la Policía Nacional. En el asalto frustrado se habían apoderado de otros 62.000 euros.

A 200 por hora en la M-30

Utilizaban siempre coches de gama alta robados horas antes. El 12 de agosto eran cuatro los encapuchados los que tomaron parte en el «palo». Dos de los presuntos cacos fueron detenidos (Abel Castellano Soriano, de 28 años y 18 antecedentes, sobre todo por robos con fuerza; y Manel Seijas Torrejón, de 27 y con 22 reseñas a sus espaldas por los mismos delitos); pero los otros subieron al vehículo y emprendieron la huida . Un agente logró agarrar a uno de los ladrones cuando se subía al vehículo y fue arrastrado varios metros hasta que se soltó y quedó en mitad de la calzada.

El conductor dio marcha atrás para intentar atropellarle, sin conseguirlo, y el turismo emprendió su huida hacia la M-30 a más de 220 kilómetros por hora . La operación continúa abierta a la espera de más detenciones.

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