Los padres de la quinta víctima del Madrid Arena: «Rezamos para que nuestra hija viva»

Pilar y Fernando , los padres de María Teresa, han implorado al al cielo todo este tiempo. «Solo rezamos para que nuestra hija viva», exhalaba entonces Pilar, ocultando sus ojos tras unas gafas de sol.

Aquel días acababan de entrar a la urbanización donde viven desde hace ocho años, cerca de la estación de Chamartín. Fernando y Pilar iban cogidos por el brazo . Se aferraban fuerte el uno al otro . Tenían los rostros depauperados. Venían del hospital. No faltaban a ninguna de las visitas diarias de mañana y tarde a la UCI para ver a su niña, alternándolo con sus trabajos. En todo momento han rehusado hablar de Teresa a los medios de comunicación. «De momento no vamos a decir nada. Solo esperamos que nuestra hija se recupere», manifestaba Fernando extenuado y con rostro demacrado tras la barba canosa que lo enmascara.

Dicen los que lo conocen, que este hombre ha adelgazado sobremanera desde que ocurrió la desgracia. «Te dejamos porque tenemos que hacer la comida para nuestra hija pequeña», se despedían sin soltarse el uno del otro. En la vivienda les esperaba su otra hija, de 12 años . De momento, Pilar y Fernando no se han sumado a la acusación particular del caso Madrid Arena en el Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid con las familias de las cuatro fallecidas. Ni siquiera pensaban en los responsables. «No queremos que se utilicen nuestras palabras para acusar a nadie», expresaba Fernando. Todos sus esfuerzos y energía estaban depositados en el hospital.

Teresa repite la mayoría de las asignaturas del 2º curso del Grado de Ciencias Químicas en la Universidad Autónoma . Sus compañeros de este año apenas la conocían. «Solo hay una chica que es muy amiga de ella, que también era del curso anterior. El resto venimos de primero. No coincidimos en todas las asignaturas», contaba Sara, una de las compañeras. «Estamos esperando que se recupere pronto y vuelva a clase con nosotros», afirmaba Laura Rubio , otra alumna de Químicas.

La vida seguía en la facultad sin que muchos de los alumnos conocieran que la quinta víctima, ahora mortal, del Madrid Arena estudiaba en su campus.

El mismo día del accidente, horas antes de que Teresa sufriera el aplastamiento y entrara en parada cardiorrespiratoria en la «Thriller Music Park», dejaba constancia de su ilusión por acudir a la fiesta en su perfil personal de Twitter : «Dilema total. Sin saber cómo abrigarme esta noche. No es broma…». Ese fue su último mensaje el mismo día 31.

Una compañera de clase que también iba asistir al evento le decía: «Sé de alguien que está igual que yo contando las horas que faltan para esta noche». Un día antes, Teresa escribía: «Steve Aoki en Tomorrowland, momento pre-mañana! Genial para verlo». El día 28 hacía mención al Dj de la fiesta : «@steveaoki Madrid is waiting for you!!! Be careful» (Madrid te está esperando. Ten cuidado). Con esta frase se referiría a que fuera cuidadoso con su agresividad y excentricidades en el concierto. Aoki había informado ese mismo día de que había ido al hospital para que le hicieran unas radiografías y comprobar si estaba bien después de haberse tirado en trampolín en otra de sus últimas actuaciones.

Pasaban los días y Teresa seguía recordando el evento: «One week @steveaoki #Madrid», tuiteaba el 24 de octubre . El día 10 subió a la red social una imagen de la entrada que había comprado para el Madrid Arena. Decía que tenía ganas de ir.

Teresa era una ferviente tuitera. Dos de las cosas que más hablaba en sus post eran de sus clases y estudios de Grado y de Gran Hermano 12+1, el programa por el que sentía devoción, sobre todo por dos de sus exconcursantes de la última edición: Alessandro y Noemí . Teresa tenía un segundo perfil en Twitter. Ahí comentaba a diario, sobre todo por las noches, las novedades de sus ídolos con otras fanáticas de estos concursantes.

Desde que ingresó en el hospital no ha habido día en que alguna de sus amigas tuiteras no le hagan una mención especial. «Es una chica majísima y muy sensata . Ha sido un jarro de agua fría. Puedo imaginar lo que está pasando su entorno más cercano», opinaba @Cartales#Fuerza Tere.

No se ha escuchado hablar de Teresa apenas desde que ocurrió el suceso. Los presuntos responsables siguen lanzándose la patata caliente para que su nombre y expediente no se manche con los nombres de las fallecidas. Pilar y Fernando mantenian la esperanza de que su pequeña saliera adelante, pero ahora hay que sumar su nombre al resto de víctimas de la tragedia.