Baltar asegura que «no» piensa dimitir por su exceso de velocidad

Tras ser rechazada la tramitación de una moción de urgencia de los socialistas para que Baltar respondiera sobre este asunto, el dirigente orensano no ha rehuído ninguna de las múltiples preguntas que le han formulado PSOE y BNG, en lo que ha adquirido tintes de interrogatorio. En primer lugar, el socialista Rafael Rodríguez Villarino ha enlazado quince preguntas que después, una por una, ha respondido Baltar.

Precisamente, el día anterior, la secretaria general del PP a nivel nacional, Cuca Gamarra, le emplazaba a dar «explicaciones» para aclarar una conducta que, advertía, no puede «amparar» el partido.

Acerca del motivo de su viaje a Madrid, ha explicado que el lunes tenía que atender «varios asuntos de gestión ordinaria» como presidente de la Diputación, incluidos un encuentro con el gerente de la Fundación Democracia y Gobierno Local, de la que el ente orensano es patrono, para abordar diversos proyectos -conocedor de que éste se desplazaría esta semana a Orense-; y otro con el presidente del Instituto para el futuro del turismo, que, entre otras cuestiones, le invitó como ponente a un evento en junio en Entrerríos (Argentina), como presidente de la asociación europea de ciudades históricas termales.

Ha reiterado, como ya había hecho previamente, que lleva «muchos años» conduciendo habitualmente coches oficiales en desplazamientos para abordar temas institucionales, y sobre el exceso de velocidad, ha repetido lo dicho en la carta remitida la víspera, donde atribuyó lo sucedido a un «despiste». También ha afirmado que «viajaba» él «solo», que no utilizó la A-6 para entrar en Madrid, y que no pernoctó en la capital, sin indicar dónde se alojó por pertenecer a su «vida privada», pero que en ambos casos «no se repercutieron cargos ni dietas» a la Diputación.

Sobre por qué no hizo pública de inmediato la denuncia, se ha atenido a que asumió «personalmente el error» abonando la sanción en período voluntario y sin hacer alegaciones, a las 8.24 del miércoles, que no recurrirá a los servicios jurídicos de la Diputación y que no dimitirá.

Preguntas que se han solapado con las del BNG, y que han llevado a Baltar a ceñirse a las mismas respuestas. Como novedad, ha precisado que ha recibido tres sanciones en 11 años como presidente de la Diputación, tras recorrer «millares de kilómetros», esta última que ha trascendido y otras dos en la provincia de Orense.

El resto de preguntas han estado relacionadas con otras sanciones a vehículos oficiales de la Diputación (de los que también ha aclarado que no disponen de dispositivos para avisar de radares), que, ha explicado, siempre abonaron los infractores, en este caso, chóferes del ente, salvo una ocasión en la que no pudo identificarse al conductor. El PSOE ha querido saber si en algunos casos, en sanciones, figuraban nombres de familiares de los chóferes, y ha respondido desconocerlo: «Respongo de las mías».

Al margen del pleno, tanto el presidente del PPdeG, Alfonso Rueda, como la secretaria general, Paula Prado, han puesto en valor que Baltar hubiera pedido disculpas la víspera, sin querer «prejuzgar» hipotéticas medidas ulteriores de carácter orgánico en el seno del partido.