Feijóo señala la «estabilidad» como el reto de Galicia para los próximos cuatro años

En el acto de inicio del curso político, que este año se celebró en la Carballeira de San Xusto en Cotobade (por la negativa de la Diputación de Pontevedra a ceder el Castillo de Soutomaior ) y en el que volvió a estar acompañado por el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, el líder de los populares gallegos aseguró que no quiere en Galicia «ni divisiones, ni bloqueo ni vetos ni parálisis». « Tampoco lo quiero para el resto de España, queremos un país normal, en el que las elecciones sean las que deciden los gobiernos », añadió. Feijóo comparó la situación de estabilidad en los últimos meses con el bloqueo político a nivel nacional, y constató que « España debería parecerse más a Galicia ». «La estabilidad es un factor determinante, y es un orgullo haberla mantenido en Galicia desde el primer instante», sentenció el líder gallego.

El presidente, a modo de recordatorio, aludió al pasado gobierno de socialistas y nacionalistas e indicó que « no hace falta remontarse hasta entonces para explicar la importancia de la estabilidad y de la responsabilidad para Galicia », y añadió «ni hace falta recordar lo que era aquel gobierno bipartito; ni imaginar lo que podría llegar un multipartito, con los líos de cada partido que conforman el lío del multipartito». Concluyó su reflexión asegurando: «Basta con remontarse al pasado 20 de diciembre y ver lo que sucedió en España desde entonces y basta recordar como desde esa fecha Galicia fue aún más si cabe una excepción de responsabilidad».

Tras describir las consecuencias de la fragilidad política, el candidato del PPdeG aprovechó el encuentro para hacer balance de su gestión, y reiteró que la economía de Galicia crece , hay menos parados y los servicios públicos «están garantizados financieramente». «Queda mucho por hacer, pero lo que nadie nos puede quitar es que hoy hay más esperanza en el futuro. Dejamos Galicia mejor de lo que nos la encontramos, y eso no nos lo pueden quitar», afirmó convencido. De nuevo estableció una comparación entre la situación gallega con la nacional, Feijóo insistió en que, mientras la oposición «bloqueó el resultado electoral » en España, la Xunta de Galicia aprobó los presupuestos, bajó unos impuestos y eliminó otros, redujo el paro, aprobó la ley del Área Metropolitana de Vigo , invirtió el superávit, impulsó sectores como el naval o la automoción, y cumplió sus obligaciones contables, entre otros logros.

La intervención del candidato del PPdeG a la presidencia de la Xunta fue interrumpida con constantes salvas de aplausos por parte de los asistentes. Previamente, el presidente del PP de Pontevedra, Alfonso Rueda , se felicitó por el poder de convocatoria del partido y lo contrapuso a las escenas de otros partidos. Sin mencionar al PSdeG recordó que a «algunos actos de otras formaciones ni acude el cabeza de lista», en referencia a la ausencia del candidato vigués, Abel Losada, a un acto protagonizado por el candidato a la presidencia socialista, Xoaquín Fernández Leiceaga .

En todo caso, el vicepresidente y candidato por Pontevedra se mostró convencido de que « los gallegos no quieren líos » y recordó que durante la etapa del gobierno bipartito «los socios gobernaban y se hacían oposición por la tarde». Finalmente pronosticó que tanto Feijóo, como Mariano Rajoy continuarán al frente de los gobiernos de Galicia y España .

La fiesta del inicio del curso político también sirvió para el debut del alcalde de Cotobade, Jorge Cubela . Actuó como anfitrión y como militante disciplinado de un evento que reunió a la clase dirigente del PP español y gallego. El regidor de Cotobade dio la bienvenida a los asistentes y demostró que se conocía al dedillo los «logros» de la gestión de Rajoy y de Feijóo. También apuntó a la principal debilidad de sus adversarios de izquierda: «la división interna y los líos entre las familias de militantes». Auguró una nueva victoria para el PP y se mostró «orgulloso» de poder recibir a los líderes de su formación .