Arranca la recepción de trabajos para los premios universitarios «Contar a Ciencia»

El jurado del premio, compuesto por miembros de GCiencia, del Colexio Profesional de Xornalistas de Galicia, de La Caixa, de la Secretaría General de Universidades, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas y de las tres universidades gallegas, determinará el ganador en las últimas semanas del mes de julio , que sucederá a los premiados del año pasado, David Fontán y André Vicente, por un trabajo sobre las algas.

La presentación del premio contó con la implicación del catedrático de Medicina Legal de la Universidad de Santiago de Compostela (USC), Ángel Carracedo , quien pronunció una ponencia sobre la divulgación científica y los medios de comunicación. Carracedo, uno de los investigadores más reputados de Galicia, reclamó una «política clara y decidida» por parte de las organizaciones científicas para obtener una mayor relevancia en los medios, considerando además el actual contexto como «negativo», ya que entiende que la comunicación corporativa de estos entes es «desigual y sin estándares de ningún tipo».

No obstante, el investigador ha expuesto que no es suficiente con tener presencia sin más, puesto que «la noticia por la noticia, sin filtro, es un desastre», lo que hace necesario -en su opinión- un «código ético» para guiar las políticas comunicativas científicas . En cuanto a los propios medios de comunicación, Carracedo ha apelado a la «ética periodística» y a la presencia de «expertos» en las redacciones, para mejorar, esencialmente, la divulgación, contando «el porqué de las cosas».

El catedrático de Medicina Legal ve esto como fundamental para que los medios cumplan con su «responsabilidad social», ya que el conocimiento «es la única manera de ser libres, y para que impidan la proliferación de movimientos pseudo-científicos como los antivacunas o la medicina homeopática».

Por ello, Carracedo ha abogado por una mayor colaboración y cooperación entre científicos y periodistas , además de mencionar posibles medidas para paliar estos déficits, como la creación de departamentos de comunicación específicos en las entidades científicas para aproximarse al público más allá de las revistas especializadas.