`Madres por Almaraz´, a Sara Aagesen: «De mujer a mujer, ¿les vamos a fallar a nuestros hijos?»
ABC accede a la carta que han enviado mujeres de la comarca del Campo Arañuelo a la ministra responsable del cierre de la central nuclear
'Madres por Almaraz': la rebelión en femenino que busca salvar la central nuclear
Almaraz
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónDos mujeres, dos madres, Heather Hoff y Kristin Zaitz fundaron en 2016 lo que todavía hoy se conoce mundialmente como `Mothers for Nuclear´ (Madres por la Energía Nuclear). Ambas, con experiencia en el sector y aprovechando, además, el Día de la Tierra ... de dicho año, echaron a rodar esta iniciativa con la que querían defender la nuclear como una energía no solo necesaria, sino beneficiosa para combatir los grandes retos del cambio climático. Hay una frase que define su acción: «Amamos nuestro planeta. Amamos a nuestros hijos. Apoyamos la energía nuclear».
Estas madres fueron uno de los argumentos que, más tarde, en 2023, explican la prolongación de la vida útil de la central Diablo Canyon, en California. En la actualidad, de hecho, el movimiento ha crecido exponencialmente y continúan «combatiendo la desinformación» y concienciando, dicen, sobre los beneficios de mantener la energía nuclear. Ese camino que recorrieron Hoff y Zaitz sirvió de inspiración para que decenas de mujeres constituyesen hace unos meses `Madres por Almaraz´. El objetivo es el mismo: salvar una central nuclear que sostiene 4.000 empleos y velar por el futuro de su tierra y de sus hijos.
Según ha podido saber ABC, este grupo ha remitido tres cartas a tres mujeres que, consideran, son decisivas para el futuro de la central nuclear: la presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, la presidenta de Enresa, Olga García, y la ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Sara Aagesen. Este diario, de hecho, ha podido acceder al contenido de las mismas.
En la misiva dirigida a la ministra, las `Madres por Almaraz´ le hablan de tú, de «mujer a mujer», para desgranar la realidad de la central nuclear y el decisivo impacto que tiene en la economía y realidad demográfica de la comarca cacereña del Campo Arañuelo: «Cuando comenzó su construcción, hace más de cuarenta años, entre muchas dudas y también protestas, no podíamos imaginar el enorme impacto positivo que iba a tener en toda la comarca, hoy se calcula que Almaraz supone unos 4.000 empleos«.
Dicen, en la carta, que no pueden «mirar hacia otro lado», que actúan «como madres», porque «nada preocupa más que el futuro de un hijo, su bienestar»: «Aquí están sus raíces y queremos que nuestra tierra les siga ofreciendo un futuro, si algún día se marchan, que sea por un buen motivo, no porque su tierra languidece sin opciones de empleo y nuevas empresas». Insisten en que no van a permitir «que se vuelva a castigar a Extremadura frente a otras comunidades autónomas».
Por todo ello, piden a la ministra del ramo una reunión «para pedirte que apoyes nuestra causa, de forma clara y decidida». Además, le solicitan que reciba a las empresas propietarias: «Sabemos que tenéis diferencias en materia fiscal, pero vemos con claridad que el cierre de las centrales es mucho peor para todos que su continuidad con una menor presión fiscal». Cierran la misiva admitiendo que necesitan «el compromiso de mujeres líderes» para revertir el cierre de Almaraz.
De «extremeña a extremeña»
La carta enviada a la presidenta Enresa, Olga García, tiene un tono todavía más cercano. Sobre todo, teniendo en cuenta que García es extremeña y tuvo cargos de responsabilidad en los gobiernos socialistas de Guillermo Fernández Vara: «Como presidenta de Enresa, entidad firmante del protocolo de cierre de las centrales, humildemente, te pedimos que traslades a la vicepresidenta Aagesen la necesidad de dar continuidad a la central al menos hasta 2030«.
En el caso de la presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, se reconoce su «apoyo claro y público a nuestra causa», pero se le pide «un paso más»: «Te pedimos que consideres eliminar el (impuesto) de ámbito comunitario, conocido como ecotasa. Otras regiones como Castilla La Mancha o la Comunidad Valenciana no lo tienen o han anunciado su supresión, no permitamos que esta desigualdad paralice el futuro de nuestros hijos«. En este sentido, el ejecutivo autonómico sí que ha admitido públicamente que está considerando «adecuar» los impuestos regionales soportados por la CNA «si de ello depende su mantenimiento».
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete