El presidente de la CHJ admite a la juez de la dana que conocía el caudal del Poyo y no advirtió al Cecopi

El barranco ya estaba desbordado entonces a su paso por localidades de la zona cero como Paiporta y Catarroja, pero el ES-Alert tardío se envió a la población a las 20.11h por el riesgo que presentaba la presa de Forata. De hecho, el responsable del organismo estatal -dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica- sólo transmitió información sobre este embalse y la situación del Poyo no estuvo encima de la mesa en el Cecopi hasta que ya era demasiado tarde.

Polo ha declarado este viernes como testigo, obligado a decir la verdad, ante la magistrada que instruye la causa penal abierta por presuntos homicidios y lesiones por imprudencia. La comparecencia se ha iniciado a las 9.30h y se prevé que se alargue durante toda la jornada.

De acuerdo con fuentes jurídicas presentes consultadas por ABC, Polo ha relatado que durante una de las tres desconexiones de Cecopi para quienes, como él, seguían el encuentro de forma telemática, el jefe del Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) le advirtió de que se había enviado un correo electrónico a Emergencias de la Generalitat. El caudal del barranco alcanzaba los 1.686 metros cúbicos por segundo e iba en aumento.

Algunos de los técnicos de Emergencias que han comparecido en los últimos meses en sede judicial han subrayado que no trasladaron este mensaje al Cecopi porque no supieron interpretarlo y ya había representantes de la CHJ en la reunión. Polo ha reconocido que tampoco dijo nada al respecto cuando volvió a tener conexión. «Es un caudal importante, pero era congruente con lo que estaba pasando en todos los lados. Tampoco te llega a sorprender», ha afirmado, al tiempo que recalcaba que su única preocupación era la situación crítica de la presa de Forata.

Al respecto, ha incidido en que desconocía los otros caudales que acabaron juntándose: a los 1.600 del Poyo, se sumaron los 2.000 de l'Horteta y otros mil del Gallego. Nadie, ha aseverado, era capaz de prever lo que iba a suceder.

Interrogado de forma reiterada por el fiscal sobre por qué el organismo estatal no emitió avisos por correo durante las dos horas y media -entre las 16.13 y las 18.43h- en las que se gestó la tragedia, Polo ha justificado que esa información «no era relevante» porque «no había capacidad de reacción a partir de esos datos» y era «redundante» porque los mismos estaban actualizados cada cinco minutos en la web de la CHJ. Pese a la excepcionalidad, no consideró verbalizarlo en el Cecopi. Dio por hecho que el Gobierno autonómico ya tenía esa información porque se había enviado por los cauces habituales.

Además, debía llegar a Emergencias por otro lado, como responsable de vigilar el barranco -los bomberos forestales que lo hacían fueron retirados a la hora de comer, en otra decisión cuestionada- debido a la alerta hidrológica activada desde mediodía. Precisamente, ha acusado a la Generalitat de no haber planificado esta crisis. No podían, ha venido a decir, estar pendientes de lo que registraba un sensor para tomar medidas de protección.

Cuestionado sobre por qué se envío un correo con ese caudal, y no antes, ha descargado la decisión en los técnicos del SAIH, aunque ha criticado que se quiera «matar al mensajero», pues este sistema ofrece información complementaria que debe contrastarse.

La juez ha rechazado imputar a Polo en varias ocasiones, como pedían algunas acusaciones, porque considera que la Generalitat tenía suficiente información para actuar. Por ejemplo, las miles de llamadas al 112 advirtiendo de la catástrofe, que tampoco llegaron al Cecopi.

Durante su extensa declaración, y siempre según las distintas fuentes consultadas por este periódico, Miguel Polo Polo ha señalado que cortó el debate en el Cecopi, que empezó a las cinco de la tarde, sobre la dramática situación en Utiel para advertir del escenario de emergencia en la presa de Forata. Nunca dijo, ha recalcado, que se fuera a romper, sino que había incertidumbre sobre lo que podía pasar si el agua coronaba la infraestructura de hormigón.

Un apunte técnico que contradice otras declaraciones ante la juez, como la de la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Pilar Bernabé, que apuntaron al posible colapso de la presa como principal motivación para el envío del ES-Alert de las 20.11h, un mensaje tardío sobre el que la instructora centra la investigación y que llegó cuando se habían producido ya decenas de muertes, según el sumario de la causa.

Polo ha asegurado que pidió alrededor de las 18 horas que se alertara sobre la situación crítica de Forata para que los ciudadanos de los municipios aguas abajo subieran a pisos altos, instrucción que no se recogió en el texto final, ante la negativa de la entonces consellera responsable de emergencias e imputada en el procedimiento, Salomé Pradas, a realizar evacuaciones. Pasadas las 19h, cuando volvió a tener conexión tras un receso -y ya conocía la situación del Poyo- se dio cuenta de que todavía no se había enviado ningún aviso a la población. Pradas les leyó entonces un texto, que no le pareció bien, pero reclamó que enviaran algo.

A las 19.30h, cuando habla por teléfono con el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, la situación de la presa ya está estabilizada, pero le traslada que el Cecopi no está tomando decisiones. En ese sentido, ha criticado la falta de liderazgo de Pradas pese a su papel de directora de la emergencia. También ha indicado que el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, que llegó al complejo del 112 en l'Eliana en el que se celebraba la reunión a las 20.28h, tomó por la noche -ha hablado de las 23h- las riendas del encuentro.

El presidente de la CHJ ha sido recibido a las puertas de los juzgados de Catarroja por una decena de familiares de algunas de las 229 víctimas mortales de la barrancada, que le han reprochado su gestión de la catástrofe y su silencio durante los once meses posteriores, al tiempo que le reclamaban que dijera «la verdad».

«Venir aquí en estas condiciones no es agradable, pero no tenemos nada que ocultar», ha señalado ante los medios de comunicación. Cuestionado sobre si tiene «miedo», Polo ha respondido que «ninguno».