Mercadona lanza nuevos productos y recupera algunos clásicos para esta Navidad

Tales novedades se suman así al Paté de Jabalí con Boletus, el Paté Bonito del Norte, el Foie Gras de Pato Relleno, el Foie Entero de Pato, el Paté Fresco al Vino de Oporto y la Tabla de Paté de Pato, compuesta por cinco sabores diferentes: natural (sin mermelada), calabaza, carne en confit y gelatina de trufa, Pedro Ximénez y cebolla caramelizada.

Para estas fechas la compañía también recupera otros 'bocados' exquisitos como los dátiles con bacon (contraste entre dulce y salado), el jamón de pato y las piezas de chorizo, salchichón y lomo de bellota ibérico.

Los amantes del queso también están de enhorabuena porque vuelven las especializades en Navidad. En concreto, Mercadona recupera los Caprichos de Queso rellenos de membrillo, los Bocaditos rellenos de mermelada de papaya, el Queso de Cabra con Miel y Almendras, el Camembert con trufa y las Delicias de Queso, tabla compuesta por ocho caprichos de pimiento asado, cinco bocaditos de crocanti y cuatro bocaditos con topping de piña.

Mercadona, fiel a su compromiso de bajar precios sin tocar la calidad de los productos, sigue aplicando bajadas que llegan en estas fiestas al surtido de jamones. Así, a la bajada aplicada al Jamón Serrano Reserva el pasado mes de junio se suman ahora nuevas bajadas en la Paleta de Bellota 50% y la Paleta de Cebo Ibérico 50%.

Además, sigue manteniendo la calidad de los quesos más tradicionales como el Queso Viejo Tostado, que destaca por su sabor afrutado de alta intensidad, y el Queso Viejo de Oveja, de intenso sabor y textura firme. Ambos productos se presentan en formato de media pieza, disponible en todas las tiendas.

Mercadona puso en marcha la estrategia SPB (Siempre Precios Bajos) en 1993, después de observar y constatar que los productos que más se vendían eran los que tenían una máxima calidad al mejor precio, siempre en ese orden; y no cambiaban constantemente su coste. Durante todos estos años, la compañía no ha dejado de apostar por la calidad, que es uno de los retos principales a los que a diario se enfrentan todos los departamentos de la cadena y cuyo impulso representa una clara oportunidad para poder seguir ofreciendo a «El Jefe» (como en Mercadona se denomina a los clientes) productos, uno a uno, diferenciales.

Y todo a través de una estrategia que fomenta el consumo consciente y crítico, que se guía por criterios sociales y medioambientales, y que persigue un objetivo claro: garantizar un consumo de productos de la máxima calidad con el menor impacto posible y ayudar así a mejorar la calidad de vida de las personas que habitan este planeta y de las generaciones futuras.