Agredidas sexualmente y amenazadas por sus ex: juzgan la violencia contra dos mujeres en Valencia

Los hechos comenzaron en la madrugada del 19 de febrero de 2022 cuando el procesado, que ya había amenazado a la víctima con anterioridad, acudió a casa de su pareja sentimental, donde la mujer le permitió entrar para evitar un escándalo en la calle.

La acusación pública mantiene que una vez en la vivienda, el procesado escupió, insultó, golpeó y amenazó con unas tijeras a su expareja. Al día siguiente, se escondió en el hueco de la escalera y abordó a la víctima cuando ésta salía de casa. La agarró del pelo, la forzó a subir al coche de ella para conducir hasta una zona donde la forzó sexualmente en varias ocasiones, pese a la manifiesta negativa de la mujer.

A continuación, el hombre golpeó el vehículo de la víctima y le causó daños valorados en 1.200 euros. La mujer consiguió avisar a su hermana que llamó a la autoridad competente para detener al procesado.

La Fiscalía le considera autor de tres delitos de amenazas, dos delitos de maltrato, y los delitos de daños, vejaciones, detención ilegal y agresión sexual. La vista oral está fijada para este martes, 20 de junio, en la sección primera de la Audiencia Provincial.

No será el único caso de violencia contra una mujer que se dirimirá en los próximos días en Valencia. Un día después, la misma sección juzgará a un hombre para el que el Ministerio Público solicita provisionalmente una pena de prisión de 16 años. Lo acusa de agredir sexualmente, maltratar y amenazar a la que era su pareja sentimental.

Procesado y víctima mantuvieron una relación sentimental en la que convivieron en un municipio de la comarca de la Costera. La Fiscalía mantiene que, durante la relación, el hombre menospreciaba constantemente a la víctima y la dominaba con insultos y agresiones físicas habituales.

En una ocasión, el acusado esgrimió un cuchillo y lo dirigió a ella mientras la amenazaba de muerte. El 30 de diciembre de 2021, el procesado despertó a la víctima y la obligó a mantener relaciones sexuales, pese a que ella se negó en todo momento.

Tras dejar la relación, en febrero de 2022, el procesado fue hasta el lugar de trabajo de la víctima, un taller de reparación de vehículos, donde cogió un martillo de hierro de tres kilos y lo dirigió a la cabeza de la mujer, mientras le decía que la iba a matar.

El martillo no llegó a impactar contra la víctima por la intervención del jefe de ella, que evitó la agresión. La acusación pública le acusa de un delito de maltrato habitual, dos delitos de amenazas y un delito de agresión sexual.