Catalá y Mazón rechazan que el Puerto de Valencia se convierta en «moneda de cambio» para que Sánchez logre la investidura

El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha calificado de «muy grave» que se esté «generalizando que haya una agenda oculta de Sánchez con el separatismo». Al respecto, ha expresado que tiene constancia de «un ninguneo permanente» a la ampliación del Puerto de Valencia, que es «necesaria, urgente e irrenunciable» para el crecimiento de la autonomía.

En paralelo, la portavoz del Consell y consellera de Hacienda, Economía y Administración Pública, Ruth Merino, ha indicado que, aunque el Gobierno valenciano no tiene la confirmación de que ERC y Junts hayan pedido frenar la ampliación del puerto de la capital del Turia durante las negociaciones para la investidura, en caso de que esto se haya producido, el Ejecutivo autonómico «no va a permitir que por conseguir los votos se ponga en tela de juicio la competitividad e importancia del puerto para todos los valencianos».

Por su parte, Catalá ha asegurado estar «muy preocupada por las exigencias de Junts y de ERC» y por «las presiones que recibe el PSOE para paralizar y frenar la ampliación norte del Puerto de Valencia», al tiempo que ha afirmado «con claridad» que «Sánchez no puede convertir Valencia y su puerto en la moneda de cambio para estar en La Moncloa». «Sánchez no puede vender Valencia al precio que él quiera», ha subrayado.

«No podemos otorgar y no vamos a tolerar esa venta a partidos minoritarios, radicales y sectarios que lo único que quieren es mermar las posibilidades de la ciudad de Valencia y de su puerto», ha agregado la primera edil.

Así, la responsable municipal ha apuntado que desde las administraciones -ha dicho que en ese sentido podía hablar por el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón; el presidente de la Diputación de Valencia, Vicente Mompó, y el presidente de nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo- no se va a tolerar «que Valencia sea moneda de cambio para nada, ni para Junts ni para ERC».

«Esta es una tierra que se respeta, por la que sus vecinos han peleado mucho y que siempre han sido leales a España. Y esta tierra no se vende por los intereses de unos pocos y, mucho menos, por los intereses de independentistas radicales y sectarios que lo único que quieren es que el Puerto de Valencia merme sus posibilidades para que el puerto de Barcelona nos adelante», ha expuesto María José Catalá.

En la misma línea, Ruth Merino ha señalado que la Generalitat no tiene la «noticia fehaciente» de que los partidos independentistas hayan puesto sobre la mesa la paralización del proyecto, pero sí «la sospecha» a raíz de las informaciones publicadas en medios de comunicación.

En ese sentido, la portavoz del Ejecutivo autonómico ha subrayado «la contundencia de este Consell en todo lo relativo a este tema tan importante como la ampliación del Puerto y la competitividad del Puerto y de la Comunidad».

Además, ha añadido que se trata de un «tema que viene de lejos» porque la ampliación «ha estado en el punto de mira» y «se han puesto trabas a la evolución, a la ampliación y a la consolidación de este puerto como un referente del Mediterráneo, como tiene que ser«. Ha rechazado que se favorezca a »unos territorios« con »unos privilegios a cambio de que otros salgan perjudicados«.

Preguntada por la paralización de la autorización del proyecto en el Consejo de Ministros «por decisión de Sumar» y sobre la posibilidad de convocar una conferencia de presidentes junto al resto de autonomías para fijar una posición sobre debates territoriales como este, Merino ha señalado que no tiene conocimiento sobre que se vaya a celebrar pero ha asegurado que el Consell «reclamará donde haga falta que terminen las injusticias» hacia la Comunidad Valenciana, y se ha referido también al agua, las ayudas a la cerámica y la financiación autonómica.