Familias y profesores denuncian que la Generalitat aprovecha la pandemia para imponer el valenciano en Secundaria

Este domingo 28 de febrero finaliza el plazo para que los centros educativos presenten los Proyectos Lingüísticos de Centro (PLC) que, según la Ley 4/2018, de 21 de febrero, de la Generalitat, por la que se regula y promueve el plurilingüismo en el sistema educativo valenciano, «será el resultado de un proceso participativo que se basará en criterios pedagógicos».

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Sin embargo, desde la Confederación Valenciana de Padres y Madres de Alumnos (Covapa) y desde la asociación Docentes por la Libertad Lingüística critican que las medidas para frenar la pandemia del coronavirus impiden las reuniones, por lo que no es posible cumplir con el carácter participativo de la norma.

«La mayoría de consejos escolares, sobre todo en las zonas castellanohablantes, están votando en contra de los PLC , puesto que tiene que ser el resultado de la participación de todas las partes y esto, a día de hoy, no se puede cumplir. La Conselleria nos pide que incumplamos la ley», subraya Sonia Terrero , presidenta de la Covapa.

En este contexto, reclama a Educación que se paralice el proyecto para el próximo curso, igual que la Conselleria hizo el pasado año a causa de la pandemia , para lo que están realizando una recogida de firmas. «En los centros educativos no se ha cumplido con el carácter participativo que exige la ley. Haremos recursos de alzada e iremos a los tribunales si es necesario », advierte.

«No prevalece la salud de nadie y su único interés es la imposición de este proyecto lingüístico . No es una ley consensuada ni un proyecto lingüístico hecho por todos y, ni mucho menos, es con criterios pedagógicos. Va a provocar el fracaso escolar en todo el alumnado y no es normal», lamenta Terrero.

Estos PLC deben ser aprobados por los consejos escolares y, posteriormente, serán autorizados por la Conselleria. Sin embargo, en caso de que el consejo escolar no presente un proyecto con un acuerdo de dos tercios, Educación determinará el PLC para el centro . Además, este programa deberá tener un tiempo mínimo de un 25 por ciento en valenciano, un 25 por ciento en castellano y una lengua extrajera que oscile entre el quince y el 25 por ciento de las horas lectivas.

«La discriminación se lleva a cabo cuando en una zona castellanohablante la mayoría de las asignaturas troncales son en una lengua que no es la materna. No es acorde a las necesidades ni es pedagógico. La discriminación es máxima », denuncia la presidenta de la Covapa .

A su juicio, la norma «se basa en anular la lengua castellana e incorporar la valenciana». «Para proteger una lengua no hay que denostar a otra. Hasta ahora, hemos convivido con el valenciano perfectamente, toda la vida se ha estudiado sin ningún problema. Desde que se ha creado esta ley ha llegado el conflicto, de discriminación y vulneración de derechos», sostiene.

Asimismo, considera que la Ley de plurilingüismo no respeta la Ley de uso y enseñanza del valenciano de 1983, por la que el alumnado de zonas castellanohablantes está exento de la asignatura del valenciano . «Crean rechazo a la lengua valenciana, cuando no debería ser así. Todos queremos la lengua y cultura valencianas, pero como la teníamos. O hacer una ley de plurilingüismo que se base en criterios pedagógicos y cree un buen futuro académico para nuestros hijos», defiende Terrero.

La asociación de Docentes por la Libertad Lingüística también reclama la paralización de los PLC de Secundaria, Bachillerato y FP para el próximo curso -que deben adaptarse a los de los centros adscritos de Infantil y Primaria-. Su portavoz, Álvaro Mellado , considera que la norma es «contraproducente desde el punto de vista académico para el alumnado y profesorado».

«Solicitamos que se paralicen los PLC y se recoja el derecho a la exención del alumnado de zonas castellanohablantes, porque no tiene sentido estar exento del valenciano y tener otras asignaturas no lingüísticas en ese idioma. Eso puede ir acompañado de medidas que mejoren la docencia de las lenguas. Sabemos que, en general, hay un déficit del conocimiento de las lenguas por parte de los alumnos», explica Mellado.

En este contexto, han pedido el apoyo de intelectuales y personas de la cultura en España porque no quieren «transmitir que solo afecta a la Vega Baja o a algunas comarcas». «El problema va a afectar a todos. Queremos transmitir que el daño pedagógico que creemos que la ley va a infligir en los alumnos y el daño legal desborda la Vega Baja. Desde el punto de vista académico es inviable y a lo único que conduce es al fracaso escolar», sostiene.

Por su parte, la presidenta de la asociación Hablamos Español , Gloria Lago , indica que los padres están «preocupados porque cada vez se elimina más el español». Por ello, aboga por la «rebeldía» y anima a hacerles llegar una copia de los PLC para hacer un seguimiento de si se cumplen.

Además, defiende que los padres y madres compren los libros de texto en castellano y que el alumnado utilice el castellano en clase y en los exámenes. «Nadie se lo puede impedir», asevera Lago. «Estamos completamente seguros de que el proyecto de la Generalitat es la inmersión forzosa del valenciano en toda la enseñanza, incluso en las zonas de predominio del castellano. Difícilmente se va a conseguir que cambien de opinión, pero sí se pueden utilizar recursos legales y de rebeldía para sortearlo», defiende.

Por su parte, la Conselleria de Educación explica que los PLC se están desarrollando «con normalidad» y defiende que los parámetros de la Ley del plurilingüismo «garantizan la competencia lingüística del castellano y el valenciano y una mejor competencia del inglés para el alumnado de todas las comarcas valencianas».

A pesar de estas explicaciones, grupos políticos como el PPCV se mostró en contra de la «imposición lingüística» y reclamó la paralización de los PLC por el coronavirus . En el pleno de las Cortes Valencianas realizó una proposición de suspender estos proyectos para «garantizar así el respeto a la opinión de los alumnos y las familias que no pueden reunirse por la pandemia».