El cierre perimetral de Semana Santa resucita el fantasma de la 'madrileñofobia' en Valencia

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Esta semana, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig , uno de los máximos defensores de la tesis de blindar todos los límites entre autonomías ante las fiestas, dirigió un mensaje directamente hacia los ciudadanos madrileños, principal mercado emisor de turistas nacionales a la Comunidad Valenciana , en el que decía: «Esperamos a los madrileños con los brazos abiertos , pero en esta Semana Santa no será posible».

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Frente a la tesis de la Generalitat , que ha hecho suya el Ministerio de Sanidad en el plan de medidas comunes que diseña de cara a la próxima Semana Santa, la patronal Hosbec no entiende que no sea posible que los hoteles de la Comunidad Valenciana reciban 40.000 clientes de otras autonomías, mientras «que cinco millones de valencianos se pueden mover dentro del territorio».

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Los empresarios turisticos de la autonomía valenciana, que el pasado año acumularon pérdidas de 11.000 millones de euros , critican que la Comunidad Valenciana está cerrada perimetralmete desde el pasado 25 de octubre y esta medida no evitó una tercera ola del coronavirus , en una región donde la pandemia afectó con especial crudeza.

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En este contexto, la patronal muestra su preocupación por el « mensaje subliminal de turismofobia de contagio », pues consideran que el cierre perimetral traslada la culpa de la transmisión del vitus a los movimientos turísticos.

A este respecto, los hoteleros reclaman que la Generalitat marque una cifra «objetiva y respaldada» a partir de la que se podrá abrir la autonomía y proponen que sea una incidencia acumulada del coronavirus de 50 contagios por cada 100.000 habitantes. Según el último informe del Ministerio de Sanidad , a fecha del 5 de marzo, la Comunidad Valenciana tiene una incidencia de 79,32 positivos.

La Generalitat, como ha venido informando ABC , sigue manteniendo que el cierre perimetral es una medida que ha contribuido de forma decisiva a frenar la propagación de contagios . Por tanto, su idea continúa siendo la de restringir al máximo la movilidad, como mínimo hasta que pasen las fiestas de Semana Santa, el 12 de abril. Esto no impedirá que se relajen previamente algunas de las restricciones actuales .

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Al margen de los 40.000 turistas nacionales que el sector hotelero calcula que podrían venir a la Comunidad Valenciana, un alto número de madrileños cuentan con segundas residencias en el litoral de la Comunidad Valenciana, como Gandia, Cullera o Benidorm.

Esta situación generó polémica durante el pasado año, cuando algunos madrileños abandonaron la capital, que en ese momento era la más afectada por la pandemia del coronavirus , para trasladarse a sus segundas residencias en la Comunidad Valenciana, lo que provocó las críticas de integrantes del Gobierno valenciano.

Según un informe de Caixabank , la mayor parte de las segundas residencias están situadas en la costa mediterránea. En concreto, Alicante es la provincia que concentra un mayor número de segundas residencias (326.705 viviendas, un 8,9 por ciento del total nacional) y la sigue Valencia (223.885 viviendas, 6,1 por ciento del total).

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En oposición a esta idea de los cierres perimetrales, que ha abanderado el presidente Ximo Puig, su homóloga madrileña, Isabel Díaz Ayuso , se ha mostrado partidaria de la posibilidad de permitir desplazamientos de la ciudadanía entre regiones si la evolución epidemiológica del coronavirus continúa la tendencia a la baja registrada en las últimas semanas.