poder judicial
El CGPJ echa a andar este miércoles con la elección del vicepresidente del Supremo y la composición de sus comisiones
Tras dos semanas de negociaciones, los vocales llevan al pleno el acuerdo que les permitirá empezar a trabajar
Perelló pide a los políticos y al Ejecutivo respeto a la independencia judicial
La presidenta del CGPJ y del Tribunal Supremo, Isabel Perelló
Después de dos semanas de intensas negociaciones, el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) iniciará este miércoles ya de forma efectiva su mandato tras la elección, en pleno que se celebra mañana, del vicepresidente del Tribunal Supremo y la aprobación de la composición de sus ... comisiones legales y reglamentarias, una tarea en la que los veinte vocales del órgano se han empleado a fondo en los últimos días.
Todo apunta a que el magistrado del Alto Tribunal Dimitry Berberoff, propuesto por la presidenta, Isabel Perelló, como su número dos, será nombrado vicepresidente sin ningún problema para alcanzar la mayoría de tres quintos que fija la ley para los nombramientos y que se traduce en 13 de los 21 votos posibles. No en vano su elección ha sido respaldada por los dos grupos previamente como también lo ha sido la composición de las comisiones legales del Consejo, en el que, a diferencia del anterior, sus veinte vocales volverán a tener dedicación exclusiva (en el último mandato solo la tenían los de la Permanente).
Conservadores y progresistas han consensuado así, además de las vocalías territoriales, las previstas en la Ley Orgánica del Poder Judicial, que son la Comisión Permanente, la Comisión de Calificación, la Comisión Disciplinaria, la Comisión de Asuntos Económicos (CAE) y la Comisión de Igualdad.
De estas comisiones tendrá un papel relevante en este mandato del Consejo la Comisión de Calificación, por cuanto será de la que salgan las propuestas para cubrir el centenar de vacantes que hay pendientes en la cúpula judicial, 26 de ellas en el Tribunal Supremo, como consecuencia de la ley que impidió al Consejo hacer nombramientos mientras estuviera en funciones. Y es precisamente esta comisión la que está presidida por un magistrado del Tribunal, José Antonio Montero, propuesto por el PP y quien jugó un papel fundamental en la elección de Isabel Perelló. Compondrán esta comisión Esther Rojo y los vocales propuestos por el PSOE Argelia Queralt, Ricardo Bodas y Ángel Arozamena, este último tambien magistrado del Alto Tribunal.
La Comisión Permanente, presidida por la propia Perelló, estará formada por tres vocales del llamado grupo progresista (Carlos Hugo Preciado, Esther Erice y Bernardo Fernández) y cuatro propuestos por el PP (Alejandro Abascal, Pilar Jiménez, Eduardo Martínez Mediavilla e Isabel Revuelta).
Respecto a la Disciplinaria, la encargada de las sanciones a los jueces, estará integrada por los vocales propuestos por el PSOE Lucía Avilés y Ricardo Bodas y los propuestos por el PP José Luis Costa, Pilar Jiménez y José María Páez y Carlos Orga.
Al margen de los consensos que exigirá ese centenar de nombramientos pendientes, el CGPJ tiene otra responsabilidad en sus manos que tiene plazo de caducidad: el 6 de febrero tiene que tener lista la propuesta de cambio de modelo en su elección para garantizar una mayor participación de los jueces en la elección de los vocales de procedencia judicial. Este mandato era parte del acuerdo por el que PSOE y PP lograron desbloquear la renovación del órgano y que, como recordó la semana pasada el comisario Didier Reynders en Madrid, debe ser cumplido.