Guindos critica el discurso populista de la Generalitat y asegura que el Gobierno no permitirá la secesión

Guindos ha participado hoy en la 33 Reunión del Círculo de Economía de Sitges, donde ha tendido la mano a dialogar con la Generalitat para hallar una solución al debate independentista, aunque siempre dentro de la legalidad.

«¿Que queremos sacar a la economía catalana de la zona euro? ¡Pero si estamos hablando de integración! El proceso es justamente al revés», ha exclamado Guindos, que ve irracional las aspiraciones secesionistas del ejecutivo que lidera Carles Puigdemont.

«La independencia tendría un impacto extremadamente negativo sobre la sociedad catalana que el Gobierno de España no va a dejar que ocurra», ha manifestado ante los empresarios asistentes a las jornadas.

Ha afirmado, en este sentido, que dos rasgos caracterizan las políticas populistas, como son «el enemigo exterior y las recetas simplistas».

«Donde han llegado los populistas al poder llega el desánimo y la desazón social, porque se pone de manifiesto que el enemigo no está siempre fuera, en absoluto, y las recetas simplistas únicamente llevan a la melancolía y en muchas ocasiones al empobrecimiento», ha declarado.

El titular de Economía ha hecho hincapié en que en la UE «nadie le da la más mínima posibilidad de secesión a Cataluña» y ha añadido que el diálogo con la Generalitat no puede sobrepasar «los principios y líneas» que garantizan la prosperidad de la sociedad catalana y española.

El ministro ha resaltado, en este sentido, el buen momento que vive la economía española, si bien ha advertido de que existen «riesgos externos y domésticos», sin referirse explícitamente al debate soberanista, que pueden entorpecer esta recuperación.

«Cualquier cuestión que afectara a la confianza de los mercados muy rápidamente afectaría al conjunto de la actividad económica del país y a los costes de financiación del sector público y privado», ha aseverado.

Luis de Guindos, que participa en estas jornadas económicas por quinto año consecutivo, también ha comentado que el Gobierno está dispuesto a acometer la reforma de la financiación autonómica, para lo que será necesario un pacto de Estado.

El sistema resultante tendrá que combinar dos factores: la suficiencia de la financiación y la responsabilidad en la utilización de los recursos públicos, ha apuntado el ministro, que ha destacado que España es un país «extremadamente descentralizado».