Peaje urbano de cuatro euros en Barcelona: la propuesta de entidades ambientalistas que Colau estudiará

Entidades ecologistas y a favor del transporte público han presentado, coincidiendo con la cuenta atrás de un año para las próximas elecciones municipales, la campaña Barcelona'22 par a transformar «la movilidad insostenible» actual en el área metropolitana con varios proyectos entre los que destaca la implantación de un peaje urbano, además de la habitual demanda de más y mejor transporte público.

Esta barrera de pago tendría que ser de cuatro euros diarios y se plantearía «como evolución» de la actual Zona de Bajas Emisiones (ZBE), para seguir disuadiendo el uso habitual individual del vehículo privado. Es una medida «poco popular», reconocen las entidades ambientalistas, pero que cuando se implanta gana adeptos. Además, resaltan la importancia de instaurarla en Barcelona, la ciudad europea con más densidad de vehículos y la sexta más contaminada.

Las organizaciones adheridas al proyecto son Plataforma per la Qualitat de l'Aire, Associació per a la Promoció del Transport Públic, Ecologistes en Acció de Catalunya, Eixample Respira, Bicicleta Club de Catalunya, Xarxa per la Justícia Climàtica, Catalunya Camina y Associació de Prevenció d'Accidents de Trànsit. Con Barcelona'22 esperan interpelar a las administraciones.

Preguntada por el peaje urbano en una entrevista reciente en TV3, la alcaldesa Ada Colau avisó de que harían falta previamente varios informes técnicos y consenso entre administraciones para ver «a quién afecta y cómo se hacen las exenciones y modificaciones». Además, ha considerado que «no hay una única medida que lo resuelva todo» para reducir los niveles de contaminación.

Sobre lo mismo, la teniente de alcalde de Barcelona de Ecología, Urbanismo, Infraestructuras y Movilidad, Janet Sanz, ha asegurado recientemente que el Ayuntamiento «estudiará» la propuesta y ha dejado claro que para poder impulsar el peaje urbano se necesitaría «un gran acuerdo».

Además, ha recordado que la implantación de un peaje urbano requeriría cambios legislativos previos, lo que hace que el acuerdo entre las diferentes administraciones sea « indispensable» .