Un exconsultor certifica ante el juez que Urdangarín desoyó a la Casa Real y siguió vinculado a Nóos

Planellas ha declarado esta mañana como testigo en la Ciudad de la Justicia de Barcelona ante el juez Castro, desplazado junto al fiscal Pedro Horrach a la capital catalana para tomar declaración a un total de 42 testigos durante tres días. Entre ellos, trabajadores de Nóos autónomos que trabajaron para el instituto, la secretaria personal de Iñaki Urdangarín, Julita Cuquerella, o la ex consejera catalana de Salud, Marina Geli.

El ex directivo de ESADE -dimitió el pasado mes del cargo aunque sigue ejerciendo de profesor-, ya declaró ante el juez Castro en Barcelona el pasado 24 de febrero, aunque no lo hizo ante los abogados de los imputados y personados en la causa. Pese a no tener citación judicial, Planellas ha acudido esta mañana a la Ciudad de la Justicia y a petición de algunas de las partes, ha vuelto a declarar. Se le preguntó entre otros aspectos por las facturas que había cobrado por los servicios prestados al Instituto Nóos, para conocer el uso de estos recibos por parte de los dirigentes de esta entidad, que al parecer las habrían triplicado para reclamarlas al gobierno balear y al valenciano por el Fórum Illes Balears, el Valencia Summit y los Juegos Europeos.

Por otra parte, a preguntas de un letrado de la defensa, Planellas ha reconocido que, como parte de sus honorarios por sus servicios prestados para el Instituto Noos, éste le pagaba el renting de un coche Volvo que él utilizaba. El exdirectivo de Esade, sin embargo, ha explicado que desconocía que, como sostienen algunas de las partes, el coche se lo pagaba la sociedad Aizoon, propiedad de los duques de Palma con la que el matrimonio gestionaba su patrimonio, y ha insistido en que pensaba que era el Instituto Noos quien se lo sufragaba como parte de su retribución.