Los padres de Canet: «Sentir el odio, la intimidación, las amenazas, el señalamiento es muy duro»

«Somos la familia de Canet de Mar de la que se ha estado hablando durante la semana pasada por haber solicitado, como tantas otras familias catalanas, la educación bilingüe en castellano y en catalán. No es nuestro interés irrumpir en la escena pública. Por ello pedimos que se respete nuestra voluntad de no convertirnos en un elemento mediático . Gracias de antemano», dicen en la arrancada de su primer pronunciamiento público en el que exponen también los miedos que tuvieron a la hora de iniciar la demanda.

«Llevábamos tiempo debatiendo en casa si pedir o no la escolarización bilingüe: 'Ahora no es el momento', 'El ambiente está muy crispado', 'El nacionalismo…', 'El procés…' , '¿Nos señalarán?', '¿Nos amenazarán?', '¿Nos harán bullying?”, 'Tiene sólo 3 añitos'. Ya os podéis imaginar», indican.

Los padres relatan que fue tras la pandemia, cuando se decidieron a dar el paso y acudieron a la Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB), a la que agradecen su asesoramiento y apoyo.

La familia expresa su confianza en las instituciones y señala que deben ser los tribunales los que deben garantizar sus derechos. «Confiamos en las instituciones y por eso acudimos a ellas. Si los gobiernos incumplen la ley, los ciudadanos podemos reclamar nuestros derechos ante los Tribunales. Es lo normal en una democracia. Y nos gusta que el sistema funcione».

Los padres acusan al Govern de incumplir la ley con un modelo lingüístico que desoye el dictado de los tribunales y le acusa de «mentir» cuando mantienen que el modelo respeta las dos lenguas oficiales. «El Govern -y no sólo él- miente cuando explica que el modelo legal en Cataluña es el de inmersión lingüística. Esto es falso. Los Tribunales han dicho que cuando hay dos lenguas cooficiales (com a casa nostra!) la enseñanza debe impartirse de forma vehicular en un mínimo del 25% para cada una de las dos lenguas y el resto debe repartirse en función de la realidad sociolingüística del centro o la presencia de otras lenguas extranjeras (¡Qué no os engañen!)», precisan en la nota, redactada en catalan y en castellano.

Recuerdan también a la Generalitat que la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluna (TSJC) dictó que esta realidad debe implantarse en todo el sistema de educativo: «¿Si se ha de aplicar en toda Cataluña, qué más da si toca o no ahora en Canet de Mar?».

«Definitivamente, el calendario no es nuestro amigo. Nos ha tocado a nosotros ser los primeros a los que les corresponde aplicar lo del 25% después de que se ordenase a la Generalitat cambiar el sistema educativo catalán », prosiguen los padres.

«El derecho a una escolarización bilingüe se nos reconoció en el mes de octubre y el Govern ha considerado ahora que era el momento de interrumpir la “calma tensa” después del procés, agitar las banderas , convocar manifestaciones de protesta y señalarnos como culpables de querer acabar con el catalán. ¡A nosotros!«, añaden.

La familia apunta a la Generalitat como instigadora de su señalamiento. «Queremos hacerle unas preguntas al consejero de Educación: si a su departamento le notificaron en octubre la interlocutoria en la que el Tribunal requiere a la dirección del centro a que realice el 25 por ciento de español en nuestra clase y no la recurrió (pese a que tenía derecho a hacerlo), ¿Por qué ha venido a nuestra escuela de Canet a protestar por la aplicación de la interlocutoria y lo ha hecho ahora y no en los casos de otros padres? ¿Quiere calentar el ambiente para las protestas? No podemos darle las gracias por alentar sentimientos de odio entre la población porque nuestra familia está sufriendo», dicen los padres.

En este sentido, reclaman recuperar la paz y «el buen ambiente» y se dirigen a la tutora de clase destacando su profesionalidad . «Cremos que eres una magnífica profesional, estamos absolutamente seguros y a gusto con tu trabajo», dicen y le agradcen también el buen trato que dipensa a su hijo. Por ello, le agradecen su esfuerzo

La familia también se dirige al resto de familias de la clase, a los que precian que « no estamos en contra del catalán, lo amamos, y disfrutamos de la gran riqueza que comporta para nosotros como individuos y como sociedad. Pero somos bilingües, y también amamos el español. Nuestra motivación no es otra que el español forme parte también de la actividad educativa, con normalidad, del mismo modo que pasa en la sociedad catalana. Por eso, es mejor tener dos lenguas vehiculares en lugar de una».

En el comunicado, los padres agradecen el apoyo recibido por otras familias del centro y les piden «un poco más»: «Que lo que nos decís en privado hacerlo en público también». «Para que nuestra sociedad sea libre debemos vencer esta espiral de silencio que nosotros mismos creamos », añaden.

Relatan, asimismo, cómo se han sentido en estos duros días de señalamiento. «Sentir el odio, la intimidación, las amenazas, el señalamiento en la propia piel es muy duro. Hemos tenido ganas de llorar muchas veces».

Finalmente, la familia expresa su gratitud a las pesonas que les han animado y advierte de que ellos no apoyan ninguna movilización que se convoque relacionada con su caso . «Hemos notado el sentimiento de solidaridad de mucha gente de Cataluña y del resto de España y, por ello, nos sentimos muy afortunados de vivir en una sociedad así y pedimos a todo el mundo que mantenga la serenidad y las reglas que facilitan la convivencia.

«Con el nudo todavía en la garganta, hemos llegado a la siguiente conclusión: hay que dejar de tragar y tragar y tenemos que ser capaces de ser valientes para decir lo que uno piensa, levantarse para hacerlo y reclamar democráticamente nuestros derechos . Es tiempo de construir una escuela de todos, inclusiva de verdad. Como decía Bob, 'Stand up for your rights'», concluye el comunicado.