Los testigos ratifican ante la juez la versión de la denunciante de Alves
La prima y la amiga de la víctima, así como empleados de la discoteca apuntalan su declaración
Más problemas para Alves: le piden una indemnización millonaria y le abandonan los patrocinadores
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Barcelona
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Iniciar sesiónEn su declaración ante los Mossos d'Esquadra, la joven de 23 años que denunció a Dani Alves por agresión sexual explicó que vio como el futbolista «tocaba» a sus amigas y «lo pegado que estaba a ellas». Ocurrió en uno de los ... reservados de la discoteca Sutton de Barcelona, la madrugada del 30 al 31 de diciembre.
Este viernes, en su declaración ante la titular del Juzgado de Instrucción 15 de Barcelona, ambas, la prima y la amiga, así lo han ratificado. «Dani estaba insistiendo y muy pesado», explicó la víctima a la Policía, y ahora lo corroboran las jóvenes que estuvieron con ella aquella noche, en el local de la calle Tuset. Por este motivo, la juez ha ofrecido a una de ellas denunciar al futbolista por los tocamientos que habría sufrido, pero esta ha declinado el ofrecimiento.
También esta mañana, seis trabajadores de Sutton han prestado declaración como testigos ante la juez, y han ratificado lo que expusieron a los investigadores. Y es que fueron responsables de seguridad del local quienes se percataron del estado de la chica, que abandonó llorando el espacio.
Uno de los porteros, aquella noche, le preguntó: «¿Qué pasa? ¿Mal de amores?». No era mal de amores. Alguien le explicó que no, que quien lloraba desconsolada había sufrido una agresión sexual en el interior del local. Fue así como sus responsables activaron el protocolo para protegerla. La trasladaron a una sala, según relató ella misma en su declaración, junto a su amiga y su prima. No podía parar de llorar. Entonces alertaron a los Mossos d'Esquadra, pero el presunto agresor, Alves, ya había abandonado la discoteca.
¿Excarcelación?
Semanas más tarde, el viernes 20 de enero, los Mossos detuvieron a Alves a raíz de los indicios que habían recabado contra él. Entre ellos, el relato de los testigos, el parte médico del Hospital Clínic tras atender a la víctima, y las cámaras de seguridad de Sutton.
Ese mismo día, el futbolista pasó a disposición judicial y la jueza lo envió a prisión provisional, donde permanece desde entonces, aunque su defensa ya ha pedido su excarcelación.
La Audiencia de Barcelona tiene pendiente resolver este recurso para decidir si Alves sigue en prisión provisional hasta que el caso se juzgue o si puede quedar en libertad con alguna medida cautelar.
El abogado del jugador, Cristóbal Martell, ha propuesto al tribunal que Alves entregue su pasaporte y lleve una pulsera de geolocalización para garantizar que no se fugará mientras se investiga el caso. Esta mañana, tras la advertencia de la jueza a las partes de no revelar información sobre los interrogatorios, el penalista indicó que «persisten las inconsistencias». Su defendido alega que no hubo agresión, sino que las relaciones fueron consentidas.
El 31 de diciembre, cuando este diario avanzó que la Policía catalana lo investigaba, Alves aseguró que en Sutton no había «pasado nada». Para aclarar la contradicción, el brasileño aseguró después que negó los hechos porque no quería que su familia se enterase de la relación extramatrimonial.
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