Puigdemont: «Gente del PSOE ha venido a verme para generarme expectativas de un buen trato»
El expresidente deja claro que el conflicto es político y que, por ello, una solución personal no lo resolverá
Quiénes son los líderes del 'procés' que se benefician si se reforma el delito de sedición
A. Cabeza
Barcelona
Coincidiendo con el quinto aniversario de su fuga a Bélgica y con el debate caliente sobre la reforma de la sedición que podría allanar su vuelta a España, el expresidente Carles Puigdemont ha echado más leña al fuego este domingo al revelar que «gente ... del PSOE ha venido a verme para generarme expectativas de un buen trato, vía reforma del Código Penal y un indulto», eso día accediendo, a cambio, a comparecer ante el Tribunal Supremo.
Así lo ha confesado en una publicación en su cuenta de Twitter titulada 'Cinco años en el exilio' en la que deja claro que «Pedro Sánchez sabe de qué hablo». Sobre esto, asegura que siempre ha sido claro ante todas las «soluciones felices» que le han propuesto y ha rechazado, en múltiples ocasiones, «una solución personal» a su causa porque entiende que sería «una renuncia política».
Para Puigdemont, «como se trata de un conflicto político las soluciones personales no lo resolverán» y por eso confiesa en el artículo que «no he buscado de qué manera pasaría menos años en una cárcel española ni he esperado nunca los beneficios que se aplican a otros». «Ni lo busco, ni lo quiero, este beneficio personal. Tampoco lo pienso pedir de rodillas», insiste.
Además, en sus explicaciones hace hincapié en que no ve beneficio alguno en la reforma del delito de sedición que ahora se está planteando para resolver el conflicto entre España y Cataluña. «Puedo entender los beneficios que tiene para el Estado español que yo aceptara una resolución basada en la reforma del código penal, pero los beneficios para el 'procés' independentista no los veo pro ningún lado», comenta.
Por otro lado, el expresident aprovecha para criticar a ERC, junto al PSOE, porque le consta de que ambas formaciones, dentro de sus negociaciones, han planteado resolver su situación personal. «Si no se lo he pedido ni autorizado, ¿por qué razón insisten? ¿Qué buscan?», ha planteado.
«Campañas sucias, amenazas, espionajes y acoso»
Puigdemont también ha usado la carta para volver a denunciar que durante los cinco años que lleva exiliado ha tenido que aguantar «todo tipo de campañas sucias, amenazas muy graves, seguimientos, espionajes y acoso familiar». Todo esto lo achaca al «espíritu del '¡a por ellos!' que decretó el rey español, con la participación de casi todos los partidos políticos españoles y la inmensa mayoría de los medios de comunicación».
Con todo, el líder independentista recuerda que hace cinco años decidió huir y continuar su lucha en la distancia, que desde entonces el sentido de su estrategia no ha cambiado y que con todo lo que ha pasado desde 2017 ha quedado reforzada la necesidad de seguir allí.
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