García-Gallardo, sobre su marcha de la Junta: «No ha sido una decisión fácil, pero no por ello poco meditada»

En este sentido, también ha señalado que cree que tanto el consejero de Agricultura, Gerardo Dueñas, como el de Empleo, Mariano Veganzones, se irán «porque me trasladaron que vinieron conmigo y también se irían», mientras que el consejero de Cultura, Gonzalo Santonja, no le ha detallado «una decisión clara».

Juan García-Gallardo (Vox) deja de ser vicepresidente de la Junta de Castilla y León tras presentar este viernes formalmente su dimisión al jefe del Ejecutivo autonómico, Alfonso Fernández Mañueco. Una decisión que, según ha dicho en rueda de prensa, «no ha sido fácil, pero no por ello poco meditada».

En ese sentido, ha asegurado que su decisión se ha llevado a cabo tras una «reflexión en los últimos días sobre los acontecimientos en el debate nacional y regional».

El dirigente autonómico de Vox ha culpado directamente al presidente del PP nacional, Alberto Núñez Feijóo, de la ruptura de los gobiernos automómicos que su partido tenía en coalición con los populares. Además, ha asegurado que al entregar su dimisión al presidente de la Junta, de quien se ha despedido con «cariño y afecto».

El hasta ahora vicepresidente de la Junta pasará a ser portavoz de Vox en las Cortes de Castilla y León , un cargo que ha dicho que ejercerá con «responsabilidad».

Sobre los consejeros, ha indicado que la decisión del «Comité Ejecutivo nacional fue que se saliese de los gobiernos y eso incluye a los consejeros». «Nuestro deseo es que dimitan y renuncien pero es una decisión personal y yo comparezco en primera persona. Esta en su mano que dimitan o no», ha indicado.

Ha señalado que el acuerdo que adoptó el jueves el Comité Ejecutivo Nacional de su partido afecta solo a los gobiernos autonómicos y están excluidos los parlamentos, ayuntamientos y diputaciones. Por ello, ha defendido que su compañero de partido, el actual presidente de las Cortes de Castilla y León, Carlos Pollán, se mantenga al frente de la institución en la que, ha matizado que «los parlamentos no toman decisiones de gobierno ni contribuyen al efecto llamada. No tendría sentido por ello renunciar a su presidencia».