Salamanca desarrolla un plan para detectar casos de alzheimer leve y precoz

El alcalde salmantino, Carlos García Carbayo , ha mostrado su satisfacción por desarrollar este plan, que ha considerado como «pionero en toda España», que será coordinado por el psiquiatra Ángel Luis Montejo y en el que colaborarán investigadores de la Universidad de Salamanca y la Federación de Asociaciones de Mayores de Salamanca (Famasa), informa Efe.

«Con este proyecto nos adelantamos a todo el país. Ojalá cunda el ejemplo. En la actualidad, unas 9.000 personas mayores de 65 años presentan alguna deficiencia en Salamanca. Este año, la inversión será de 65.000 euros y se destinará al acopio de materiales. El próximo año ya se destinarán unos 163.000 euros», ha agregado García Carbayo.

Además, ha destacado que el programa busca anticiparse a los primeros síntomas de alzheimer, ya que, según el alcalde salmantino, en el sistema sanitario «existe una gran laguna pues los pacientes entran en el circuito sanitario cuando es demasiado tarde ».

El Ayuntamiento financiará la contratación del personal investigador de la Universidad de Salamanca, así como los materiales necesarios, además de la cesión de dos aulas en el Centro Municipal Integrado del barrio salmantino de Puente Ladrillo.

Por su parte, el coordinador del proyecto, Ángel Luis Montejo, ha reconocido que el acceso a un tratamiento de una persona con alzheimer «es una vía lenta, de dos o tres años» , un tiempo que para él «es precioso».

Y ha señalado que con este plan se pretende «detectar de forma muy precoz a las personas que hacen sus primeras quejas cognitivas», por lo que si se da «un diagnóstico correcto y amplio, sometiendo al paciente a determinadas pruebas neurológicas, se sabría a tiempo como actuar».

Su principal objetivo es evaluar al menos a 1.000 personas durante el primer año , para lo que se estará en contacto con los médicos de Atención Primaria y las asociaciones de mayores para localizar a estos pacientes. En la primera fase, hasta después de Navidad, empezarán con dos grupos de unas cinco personas, para cumplir los protocolos sanitarios, dos veces a la semana, y más tarde, tratarán de trabajar con el doble de personas.