Mañueco y Silván se enfrentarán en unas primarias inéditas

Desde la semana pasada, Rajoy sabía que el burgalés no quería repetir y ante la imposibilidad de una candidatura conjunta entre Mañueco y Silván, finalmente ayer se decidió entre Herrera y Génova que ambos candidatos tendrían que medir sus fuerzas en este congreso. Los tira y afloja entre Herrera y Rajoy sobre quién tenía que encabezar esa lista llevó al traste cualquier acuerdo. El nombre de Pablo Casado también estuvo muy presente en estas negociaciones. Ahora comienza un proceso desconocido en Castilla y León y que se suma a lo que está ocurriendo en otros territorios, aunque quizá en éste con dos políticos de gran peso y de un perfil similar. Ambos son alcaldes, cargos relevantes en el organigrama del partido, exconsejeros de la Junta y con una diferencia de edad de sólo tres años. Ayer por la tarde, Herrera y los nuevos candidatos llegaban a este acuerdo de forma tranquila y en un ambiente relajado.

Mañueco y Silván tienen todo preparado para presentar los 90 avales necesarios y cuyo plazo de presentación concluye hoy. El partido vivirá un mes de marzo complicado tras años y años en los que todos a una han estado junto a Herrera y sin apenas conflictos ni divisiones internas. Los apoyos de ambos son bien distintos, aunque aún no se puede hablar de corrientes. El secretario regional del PP y alcalde de Salamanca siempre ha sido el favorito de Génova. Tanto la actual secretaria general, Dolores de Cospedal, como el coordinador, Fernando Martínez Maillo , han sido políticos muy cercanos a Mañueco, si bien es cierto, que el dirigente zamorano tiene que mantenerse públicamente neutral en este proceso. El salmantino lleva como número dos del PP regional 15 años, tiempo en el que ha podido mantener un contacto muy directo con las organizaciones provinciales y ha sido su interlocutor en reiteradas ocasiones. No hay que olvidar que es el presidente de la Comisión de Derechos y Garantías del Comité Ejecutivo Nacional.

El alcalde de León sabe que tiene el respaldo político de Juan Vicente Herrera y de la mayor parte de los miembros del Consejo de Gobierno de la Junta. Su provincia es su principal aval, aunque también existen otros territorios donde podría conseguir una mayoría de apoyos. En el pasado Congreso Nacional del PP entró como vocal. Sea como fuere, el PP de Castilla y León se enfrenta también a una nueva situación: la bicefalia. Herrera seguirá al frente de la Presidencia de la Junta hasta 2019 y un nuevo presidente del PP tendrá que coger las riendas de la actividad política, incluida, el grupo parlamentario en las Cortes.