Suscribete a
ABC Premium

Adiós a «la roca» de Isabel II, un verdadero caballero que vivió a su manera

El Duque de Edimburgo muere a los 99 años en el castillo de Windsor, tres semanas después de haber recibido el alta en un hospital de Londres tras una operación de corazón

La Reina de Inglaterra y el Príncipe Felipe, en 2014, pasean por un campo de amapolas artificiales en homenaje a las víctimas de la I Guerra Mundial EFE | Vídeo: ABC Multimedia
Luis Ventoso

Esta funcionalidad es sólo para registrados

El Duque de Edimburgo , tataranieto de la Emperatriz Victoria, nacido en 1921 en el palacio Mon Repos de Corfú como Príncipe Felipe de Grecia y Dinamarca, tenía a gala que sabía cómo romper el hielo ante la respetuosa tensión que provocaba la aparición ... en público de su mujer, la magnífica Isabel II : «Soy capaz de hacer reír a la gente en quince segundos». El veterano dandy, siempre impecable, mantuvo hasta el final esa querencia por el humor, dándose el gustazo además de que la corrección política no iba con él. También cultivaba un cierto tono de galanteo, manifiestamente autoparódico, pero eco tal vez de su mocedad, cuando deslumbraba como un apolíneo oficial de la Marina, de 188 centímetros de talla y cabello rubio.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia