Los vecinos denuncian el oscurantismo de la carretera de la costa: «No entrará una pala si podemos evitarlo»

«Estuvimos meses en vilo pensando que el volcán se llevaría nuestras tierras y casas, pero resulta que era después del volcán cuando la íbamos a perder por una administración que dice comprendernos». Denuncia a ABC que «aunque hablan de diálogo, y dijeron que iba a haber consenso , en realidad solo hablan ellos».

La nueva carretera de emergencia tendrá unos 8,5 kilómetros de longitud, 5,5 aproximadamente de nuevo trazado y unirá Puerto Naos y Tazacorte con una inversión estimada de unos 38 millones de euros , que incluyen aproximadamente 9,3 millones de euros previstos en concepto de expropiaciones.

Los afectados quieren que se les consulte, que se les explique, que se hable con ellos. Critican el oscurantismo del proceso que, temen, podría empezar a pesar del desacuerdo de los vecinos. « Aquí no entrará una pala mientras podamos evitarlo, hemos aconsejado a los vecinos que avisen para llamar a la Guardia Civil y que se personen y levantar acta», porque «puedes acostarte y levantarte en la mañana con un tractor está construyendo una carretera en tu jardín».

El trazado de la carretera de la costa, adjudicada de emergencia, «dicen que afectará a 3,2 hectáreas y a ninguna casa , y eso es absolutamente falso» , ya que solo con ver el mapa «ya se ve que al menos 10 hectáreas (100.000 metros cuadrados) se llevará por delante, y eso sin contar con las entradas y salidas , los taludes, las vías accesorias, cambios de sentidos que tenga la vía». Por ahora «es solo una carretera recta» y es imposible que sean 3,2 hectáreas, « calculamos 10 como mínimo, pero seguramente más , y de cultivo no es que allí no haya nada». Es terreno «productivo, y con un impacto ambiental y visual importantísimo».

Vicente y los vecinos buscan que se les escuche, el diálogo, que se planteen otras propuestas , como realizar la carretera sobre el trazado antiguo o sobre la lava, como están haciendo en La Laguna.

Ellos «siguen con su idea de pasar la carretera por dónde han dicho y no está abiertos a cambiar los tramos» . Ellos y ellas «no sabemos nada, se han saltado todo el procedimiento escudándose en la emergencia» , porque no se entiende que «presenten un trazado que es independiente a los planes de ordenación de la isla, o impacto ambiental». Además, «a los propietarios de la zona afectada no se nos ha comunicado el inicio de un expediente de expropiación forzosa» porque «ni siquiera ellos saben» el trazado concreto, que dicen que dependerá de las coladas.

Los vecinos «buscan el origen del proyecto y contra quién ir, con una demanda o reclamación, denuncia, para tratar de buscar opciones». Están en contra del trazado actual pero «es que ni siquiera sabemos a quién denunciarlo» , ante quien personarse, con quién hablar porque «se agarran a la emergencia para hacerlo todo de la forma más oscura» . Esta carretera «se ha saltado todos los trámites, de información, alegaciones, concurso público, informes de impacto ambiental», y cuando hablan con las administraciones «el ayuntamiento pasa la pelota al Cabildo, el Cabildo al Gobierno canario y el canario al Central» y no saben «ni quien financia, ni quien ejecuta, nada». Han presentado dos reclamaciones al portal de transparencia «porque esto transparente no es», y confían que desde aquí «sepamos al menos a quién dirigirnos para denunciar esta cuestión».

No saben, ni siquiera, qué pasará con los terrenos afectados porque nadie les ha contado. « Será expropiación forzosa y pagarán por ella lo que quieran« sin que los vecinos puedan opinar al respecto . Los vecinos que están dentro del trazado «no tienen ninguna opción, ninguna» , porque «no han tenido acceso a la información pública ni de publicidad» y hacer las cosas de esta forma «va en contra del derecho propio a la propiedad privada». Las expropiaciones se pueden hacer «por interés general, pero debe ser con todas las garantías constitucionales y legales , y no agarrándose a la emergencia».

Los vecinos están decididos a «hacer lo posible» para que recapaciten, porque reconstruir La Palma de espaldas a los palmeros no es la isla que quieren. Vicente Rodríguez no comprende «cómo hablan de medio ambiente, de sostenibilidad, de isla verde, para luego hacer una carretera en una de las zonas más ricas en plataneras», porque más bien parece que « quieren crear una zona como el sur de Tenerife o de Gran Canaria , más que la convivencia del hombre con la naturaleza» de la que hablan y la que desean los vecinos.

El diputado regional de Sí Podemos Canarias, Francisco Déniz, ha defendido durante la Comisión de estudio para la reconstrucción de La Palma que los afectados por la carretera de la costa «viven con incertidumbre el trazado actual, que elimina fincas productivas, y por qué no pueden presentar alegaciones o resolver sus dudas al respecto».

«¿Dónde se ha decidido, sin consultar a la ciudadanía palmera, que el plan sea quitar fincas para construir macrohoteles?», ha reflexionado, y plantea que la reconstrucción de La Palma tras el volcán «sea una excusa para desarrollar viejos proyectos urbanísticos para el turismo de masas ».

« No se le puede hurtar a la población palmera presentar alegaciones si algunos quieren apostar por un modelo de turismo de masas en La Palma», ha dicho.

Para Déniz, «no puede ser que a la incertidumbre del volcán le siga la incertidumbre de una reconstrucción», que para el diputado regional debe «mantener las señas y características de la isla en su condición verde», que protejan el mundo rural y la singularidad de la isla.