Las Cortes publican ya la ley de amnistía, a la espera del BOE para su entrada en vigor

El jueves pasado, cuando el Congreso aprobó la amnistía de forma definitiva al levantar el veto del Senado, fuentes del Gobierno sostenían en el patio de la Cámara Baja que, antes de su publicación en el BOE, la norma debía ser recogida en el BOCG. Un extremo que desmienten a ABC tanto fuentes parlamentarias como jurídicas que coinciden en que, si bien lo habitual es que las Cortes publiquen las leyes antes que el 'Boletín Oficial del Estado', esto no es ni mucho menos un precepto obligatorio.

Una vez se aprueba un proyecto de ley o una proposición de ley, el Rey tiene quince días para sancionarlos. Y cumplimentado ese trámite, la norma puede publicarse en el BOE enseguida. «El Rey sancionará en el plazo de quince días las leyes aprobadas por las Cortes Generales, y las promulgará y ordenará su inmediata publicación», dice concretamente el artículo 91 de la Constitución, sin que en ningún otro lugar del ordenamiento jurídico se especifique que la publicación en el BOCG deba ser anterior a la del BOE.

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«Habitualmente se espera a que salga en el BOCG, pero no es obligatorio», responden a ABC desde la Mesa del Congreso, a la pregunta de si el BOE debe aguardar a la Cámara Baja para publicar una ley. Eso sí, estas fuentes aseguran que se están siguiendo los trámites habituales. Fuentes del Ministerio de Presidencia consultadas por este periódico también manifiestan lo mismo: «La tramitación para su publicación en el BOE está dentro de la normalidad. Los plazos son los que siempre maneja el BOE, para esta y para otras leyes».

Este diario ha cotejado todas las leyes aprobadas durante el año 2023 y es verdad que el periodo medio de publicación supera los nueve días desde su aprobación definitiva en el Congreso o en el Senado. Bien es cierto que hay casos donde es casi inmediata, como la reforma de la ley del 'solo sí es sí', pactada entre el PSOE y el PP para taponar las rebajas de penas y excarcelaciones de agresores sexuales, que salió en el BOE tres días después de su aval final.

Esta legislatura, además de la ley de amnistía, solo se han aprobado la reforma del artículo 49 de la Constitución —para sustituir el término 'disminuidos' por 'personas con discapacidad'— el 25 de enero, y no se publicó en el BOE hasta el 17 de febrero, y el proyecto de ley de enseñanzas artísticas, aún pendiente de publicación, pero avalado en el Congreso el 22 de mayo. Aun así, llama la atención la demora en la llegada al BOE de la ley de amnistía cuando es una norma cuyos trámites han acelerado el PSOE y sus socios desde que fue registrada en noviembre por los socialistas.

Esta ley, a pesar de las dudas sobre su constitucionalidad —la legislatura pasada se rechazó la mera calificación de una con el mismo objeto porque los letrados del Congreso alertaron de que entraba «en contradicción palmaria» con la Carta Magna—, fue tramitada por el procedimiento de urgencia. El PSOE y sus aliados, además, impidieron que se solicitasen informes sobre ella a los órganos consultivos del Estado, como exigió el PP en la Mesa de la Cámara Baja. Ahora, una vez aprobada, y en plena campaña de las europeas, la ley sí sigue los ritmos habituales en otras normas.

Según consta en su texto, una vez se publique en el BOE, entrará inmediatamente en vigor. Será el momento de comprobar si las cuestiones prejudiciales que puedan elevar algunos jueces a la Unión Europea paralizan su aplicación o si, como defienden los independentistas, la redacción de la norma es suficiente para que se levanten todas las medidas cautelares contra los encausados por el 'procés', y para que, por tanto, pueda regresar a España el prófugo Carles Puigdemont sin asumir sus responsabilidades penales.