El líder de Vox en Baleares se marcha al Congreso y allana el camino para un Govern del PP en solitario

Ha sido el propio Campos quien ha confirmado este lunes que se marcha a Madrid «una vez encauzada la negociación con el PP». El líder de Vox en Baleares ya ha solicitado a la mesa de la diputación permanente la retirada de la credencial de diputado electo, por lo que este martes ya no tomará posesión del cargo como diputado en el pleno de constitución del nuevo Parlamento balear.

La salida de Campos a Madrid abre un nuevo escenario en las negociaciones bilaterales entre ambos partidos para investir a la popular Marga Prohens como presidenta del Govern balear, quien se mantiene firme en formar un gobierno en minoría. Vox, reivindica entrar en el Ejecutivo autonómico -tras quedarse fuera en el Ayuntamiento de Palma- y aspira, además, a la presidencia de la mesa del Parlament. El principal obstáculo entre ambas formaciones es precisamente en materia lingüística. El PP apuesta por la libre elección de lengua en la primera enseñanza mientras Vox pide que se extienda a todas las etapas. Se da por hecho que la salida de Campos allana el camino a partir de ahora con los populares por la falta de sintonía entre ambos líderes.

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Aunque Campos asegura que deja las negociaciones «encauzadas», a estas alturas el PP y Vox siguen sin llegar a un acuerdo que facilite la investidura de la líder popular cuando ya está en marcha la constitución de la Cámara balear.Este martes se celebra el pleno para constituir el nuevo Parlamento balear a instancias de los populares. El PP decidió no apurar el plazo que tenía hasta el 27 de junio y meter presión al partido verde, después de que éste haya endurecido sus exigencias bajo las directrices de Santiago Abascal, exigiendo entrar en el Ejecutivo autonómico a imagen y semejanza de la Comunidad Valenciana.

El PP mueve ficha al estilo de Murcia y pidió formalmente este viernes al presidente en funciones del Parlament balear, el socialista Vicenç Thomàs, que convoque el pleno de constitución de la Mesa sin más dilación. Dos días antes solicitó que se paralizara la convocatoria de la constitución de la Cámara balear, un gesto que parecía ir encaminado a reservar a Vox alguno de los puestos de la Mesa.

A partir del martes día 20, Marga Prohens tiene 15 días para presentarse a la investidura como presidenta del Govern. Y otros 60 días para conseguir ser presidenta, con cuatro votos favorables en la primera votación o cuatro abstenciones en la segunda. Pasado este plazo sin investidura, el Parlament balear quedaría disuelto y se convocarían nuevas elecciones.

Mientras el Govern balear sigue en el aire, el PP ya ha dejado a Vox fuera del principal ayuntamiento, el de Palma, y gobernará en solitario. Desde este sábado Jaime Martínez ya es alcalde de la capital balear con un gobierno en minoría con un Vox que promete hacer una oposición «constructiva pero dura».

Fulgencio Coll (Vox) exige ya 12 «medidas urgentes» al nuevo equipo de gobierno en el Ayuntamiento, entre las cuales pide modificar la normativa lingüística municipal para que todos los ciudadanos puedan dirigirse y sean contestados en las dos lenguas cooficiales sin necesidad de petición previa, y para que las publicaciones del Ayuntamiento recojan esa «realidad bilingüe».