El Ebro presenta una alarmante concentración de almeja asiática : más de 200 ejemplares en tan solo medio metro cuadrado. Así lo ha desvelado el primer muestreo de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) para medir la presencia de esta especie invasora.
Desde que fue avistada por primera vez, en 2004, la almeja asiática se ha extendido prácticamente por todo el Ebro. A tal punto ha llegado la colonización, que erradicar esta especie invasora , que altera la «salud» de estos ecosistemas fluviales, se da por imposible.
Lo más a lo que se puede aspirar es a «ralentizar su expansión» , para ello es necesario conocer con precisión la dimensión del problema.
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