Un año de récord de misiones para la BRI X de Córdoba

En total, alrededor de unos 1.500 militares (de los casi 2.800 que con­forman el personal de tropa) de la base de Cerro Muriano han cargado sus petates a lo largo de este 2022 para intervenir en operaciones de mantenimiento de la paz. Este macrodespliegue ha supuesto un significativo esfuerzo logístico y de medios materiales y humanos para la Brigada cordobesa, que se ve obli­gada a pausar su contribución en más misiones en el extranjero en 2023.

Durante el próximo año, la BRI se «recompondrá», tal y como anun­ció su general jefe y comandante militar de las provincias de Córdoba y Jaén, Ignacio Olazábal, con el obje­tivo de estar plenamente operativa en 2024 para cumplir con los com­promisos del Ejército español.

El primero de los cometidos inter­nacionales al que ha tenido que hacer frente la BRI 'Guzmán El Bueno' X este año que concluye ha sido su despliegue en Letonia, en el marco de la denominada 'Presencia Avanzada Reforzada' (ePF, en sus siglas en inglés) X. En total, unos 280 efectivos de la uni­dad cordobesa se han integrado en dos rotaciones en un Battle Group bajo mando de la OTAN. España ha participado en esta operación con un total de 350 militares.

Su misión se ha centrado en con­tribuir a la estabilidad de la seguri­dad euroatlántica, así como a la pre­vención de conflictos mediante medidas de disuasión, respondien­do al compromiso existente en el seno de la Alianza de ayudar a los países aliados.

La Enhanced Forward Presence, que proseguirá hasta comienzos de 2023, es una operación de naturale­za defensiva, multinacional, en base a aportaciones voluntarias, intero­perable y con capacidad para des­plegar en los países bálticos y Polonia. La entidad de la eFP ha sido establecida en cuatro 'Battle Groups' (BG) liderados por los Estados Unidos de América, Reino Unido, Alemania y Canadá. La parti­cipación de España se lleva a cabo en el marco del BG liderado por Canadá.

Es la tercera vez que la Brigada par­ticipa en esta misión de la OTAN. Ya lo hizo con anterioridad también en enero de 2020, hace justo dos años. Pero, en esta ocasión, la guerra entre Rusia y Ucrania ha generado un ries­go tangible para los soldados cordo­beses. Algo que unido a las condicio­nes atmosféricas, con un crudo invierno, ha complicado la misión. No obstante, según el general jefe de la BRI, los efectivos han demostrado su entrega y entusiasmo para cum­plir con los cometidos asignados, con una confianza plena en sus capacida­des gracias al estricto y completo adiestramiento recibido.

En mayo de 2022, la BRI X llegó a su segundo destino, ya conocido de sobra: Líbano, con la operación Libre Hidalgo XXXVII, como conti­nuación del compromiso adquirido con la ONU desde que España des­plegara en el país en 2006. El con­tingente, de unos 600 militares de la unidad cordobesa, al mando del general de brigada Ignacio Olazábal, ha continuado garanti­zando el cumplimiento de la Resolución 1701 por parte de la ONU en el país libanés.

Esta ha sido la sexta vez que el personal de la base de Cerro Muriano pone rumbo a tierras liba­nesas para participar en una misión que tiene entre sus tareas vigilar el cese de las hostilidades entre Hezbollah e Israel y acompañar y ayudar a las Fuerzas Armadas liba­nesas en el sur del país y a lo largo de la separación entre los dos esta­dos, la llamada línea azul. También garantiza el acceso humanitario a las poblaciones civiles y el retorno voluntario y seguro de las personas desplazadas.

El último de los cometidos ha contado con un número más redu­cido de efectivos, ya que solo ha par­ticipado una unidad del grupo de artillería, desplegada en la base aérea de Incirlik, en Turquía. Su objetivo, incrementar la protección de la población turca de Adana ante posibles ataques con misiles proce­dentes de la frontera con Siria.

Con estas tres misiones, la BRI X prosigue una andadura que inició en 1994, con motivo de su participa­ción en ejercicios multinacionales así como en operaciones de mante­nimiento de la paz.

De este modo, los soldados de la base cordobesa han desplegado cuatro veces en Bosnia Herzegovina para escoltar convoyes, dispensar ayuda humani­taria y contribuir a la desmilitariza­ción de la zona. En Kosovo han esta­do tres veces para colaborar en la consolidación de la paz en el país balcánico tras la guerra con Serbia. Al Líbano han viajado en seis oca­siones con el reto de lograr una paz entre libaneses e israelíes. En 2018, la gran unidad cordobesa sumó Letonia a sus misiones (destino al que ha regresado por tercera vez en 2022); y también ese año se estrenó en Irak, donde ha viajado en dos ocasiones.