Pedro Sánchez dispara el número de altos cargos con un 40 por ciento más que Rajoy

Desde la campaña electoral de 2011, con España en una situación muy delicada, al borde de la quiebra y con el fantasma del rescate al acecho, Rajoy prometió que metería la tijera en la administración porque sobraban «muchos organismos». Lo primero que hizo fue recortar el número de ministerios, y pasar de los 15, incluidas dos vicepresidencias, del último Gobierno de Zapatero a los 13, con una vicepresidencia.

El Gobierno de Rajoy pasó a ser el más reducido de la democracia, y el presidente encargó a su número dos, Soraya Sáenz de Santamaría, que acometiera una reforma integral de la administración pública para eliminar organismos innecesarios y reducir todos los gastos posibles.

En el balance de legislatura que hizo la vicepresidente a finales de 2015 aseguró que el proceso de reforma de la Administración había acumulado un ahorro de 30.341 millones de euros.

Durante el bloqueo político de 2016 poco o nada se pudo hacer. el Gobierno de Rajoy que se formó a finales de ese año mantuvo la misma línea de austeridad de su primera legislatura. Ahora, con la llegada de Sánchez al poder, y su necesidad de contentar a su socio de coalición, Pablo Iglesias, ha llevado al líder socialista a agigantar la estructura del Gobierno y de la administración.

De arriba abajo, el número de vicepresidentes ha pasado de uno a cuatro. Los ministros llenan ahora la mesa del Gobierno: de los 13 de la última etapa de Rajoy, ahora se ha dado un salto hasta los 22, un 69,2 por ciento más. Podría pensarse que el incremento de los ministerios ha supuesto una reducción de las secretarías de Estado, al elevar el rango de alguna de las materia. Pues no. Los secretarios de Estado son 29, frente a los 27 del Gobierno de Rajoy.

El número de secretarios generales ha subido de 17 a 23, un 35,3 por ciento más. Mientras que los subsecretarios y asimilados ahora son 30, frente a los 18 que tuvo el último Gobierno del Partido Popular (66,7 por ciento más).

El siguiente nivel de administración, los secretarios generales técnicos, llegan a 22, frente a los 13 del Ejecutivo popular, un 69,2 por ciento más. El incremento de los directos generales tampoco se ha quedado atrás: el nuevo Gobierno de coalición de Sánchez e Iglesias ha colocado a 156, un total de 43 más de los 113 que tuvo el último Ejecutivo de Rajoy. Supone un saldo positivo del 38,1 por ciento. En este punto, desde el PP se ha denunciado la vulneración de lo establecido en el artículo 66 de la Ley de Régimen Jurídico del Sector Público, al exceptuarse 23 direcciones generales de la condición de funcionario.

En total, el número de altos cargos ha pasado de 201 a 282. Son 81 altos cargos más con el Gobierno de Sánchez e Iglesias respecto a la última etapa de Rajoy: un incremento del 40,3 por ciento.

Pero a esa expansión de altos cargos en todos los ámbitos hay que añadir la proliferación de asesores que los acompañan. La evolución del personal eventual en la administración es muy significativa, y es un reflejo del gigantismo del Gobierno de Sánchez.

Rajoy dejó el Gobierno en junio de 2018, tras la moción de censura, con 177 asesores en total, distribuidos en los distintos ministerios. Ahora, la formación de este Ejecutivo de 22 carteras lleva consigo 242 asesores, 65 personas más: un incremento del 36,7 por ciento.