El PSOE utiliza el CIS para presionar a Pablo Iglesias: «Los españoles quieren un gobierno socialista»

El último sondeo de José Félix Tezanos incrementa tres puntos más la intención de voto al PSOE respecto al mes de mayo y le sitúa rozando el cuarenta por ciento del electorado. En las elecciones generales del 28 de abril los socialistas se quedaron casi once puntos por debajo (28,68%). En el lado opuesto de la balanza se sitúa ahora Unidas Podemos , que cae casi tres puntos respecto al barómetro del mes anterior —pasa de rebasar el quince por ciento a no llegar al trece—. En los comicios, la coalición se quedó en 14,31 por ciento de las papeletas, por lo que de repetirse hoy elecciones, según el CIS, la caída de Podemos se acentuaría todavía más.

Con estos datos en la mano, Simancas ha acudido reforzado al set de televisión del Congreso para responder a la carta de Pablo Iglesias en el diario «La Vanguardia». El secretario general de Podemos reclamaba a Sánchez una primera intentona de investidura el 22-23 de julio con un gobierno de coalición y le prometía renunciar a entrar en el ejecutivo si esta decaía.

La subida del PSOE y el descenso de Podemos han permitido a Simancas hablar de la «claridad meridiana» de los españoles. A su juicio, el aumento de su partido habla por sí solo —«quieren un gobierno socialista»—, por lo que ha reclamado «realismo y responsabilidad» a todos los grupos. A Podemos, específicamente, le ha pedido que acepte «la oferta razonable del candidato Sánchez» : «un gobierno de cooperación».

Este eufemismo, que viene a ocultar el rechazo de los socialistas a la entrada de Podemos en el gobierno, pasa por un acuerdo programático entre ambos partidos, en el que Simancas no ve problema alguno. «Necesitamos un gobierno ya en julio. No hagamos una sesión de investidura experimental, sino definitiva», ha afirmado Simancas en respuesta a Iglesias. Le han entrado las prisas al PSOE dos meses después de las elecciones, pero los socialistas no están dispuestos a ir más allá de la «experiencia interesante» que para ellos supuso su alianza con Podemos tras la moción de censura que derrocó a Mariano Rajoy .

El «esfuerzo» que le exige a su «socio preferente» no impide que el parlamentario socialista se haya acordado también de PP y Ciudadanos (Cs); a quienes ha reclamado «responsabilidad» porque su única alternativa pasa por la «inestabilidad».

Desde Podemos, el diputado Rafael Mayoral ha cuestionado la fiabilidad de la encuesta al apuntar que no tiene claras «las transferencias de voto», habida cuenta de que el PSOE sube casi once puntos respecto a las generales, pero Podemos baja solo tres. Sin embargo, ha advertido seriamente a Sánchez: «Lo que sería muy peligroso es que el PSOE se crea esas encuestas y piense que eso puede ser una buena motivación para ir a elecciones».

Por ello, con su partido temeroso de una repetición electoral, pero obcecado con entrar en el gobierno, Mayoral ha insistido en que no se debe «especular con los resultados de la encuesta de Tezanos». El parlamentario, de la confianza de Iglesias, no ha cerrado la puerta a continuar la negociación con el PSOE en cualquier escenario, pero sí ha querido dejar claro que son los socialistas los únicos que han puesto sobre la mesa la convocatoria electoral . «Es una irresponsabilidad», les ha espetado.

En el lado contrario del espectro político, PP y Cs han coincidido en su crítica al CIS de Tezanos, al que le siguen otorgando poca credibilidad por sus controvertidos métodos , a pesar de que fue la encuesta que más se aproximó a los resultados reales del 28-A.

El popular Guillermo Mariscal ha cargado contra esta encuesta como «una nueva utilización de las instituciones públicas en beneficio del presidente del Gobierno». A su formación la sitúa por detrás de Cs y con una caída de más de dos puntos en intención de voto con respecto al mes anterior. «Es una cocina al gusto de Sánchez», ha concluido.

Por su parte, Melisa Rodríguez , portavoz adjunta de Cs en la Cámara Baja, también se ha mostrado reacia a confiar en el CIS. «Ni cuando la encuesta del señor Sánchez nos sitúa como alternativa al sanchismo podemos darle credibilidad», ha apuntado, para después repetir un argumento muy utilizado en su partido: la única «encuesta» que les vale es la de las urnas.

Tanto Mariscal como Rodríguez han enviado sendos mensajes a Iglesias por su propuesta de probar una investidura en julio con un gobierno de coalición. Mientras el diputado del PP le ha recomendado recuperar su propuesta de hacer públicas las reuniones, «con luz y taquígrafo», la liberal le ha invitado a «en vez de escribir artículos de opinión», sentarse a negociar «de una vez».